Telescopio James Webb podría ver el fin del planeta Tierra: ¿Cómo pasaría?
El telescopio James Webb observó cómo una estrella destruyó un planeta, alertando sobre posibles finales similares para la Tierra.

El telescopio James Webb observó cómo una estrella destruyó un planeta, alertando sobre posibles finales similares para la Tierra.
El telescopio James Webb es los ojos de la NASA en el espacio, especialmente para esos puntos donde no es posible tener una visualización tan clara desde la Tierra, además este telescopio puede investigar y recolectar información sobre los diferentes acontecimientos que suceden en el espacio.
Entre uno de sus más recientes datos se ha dado a conocer que este objeto satelital podría descubrir el fin del planeta Tierra, un tema que ha inquietado a todos los habitantes en varias ocasiones. A pesar de que el espacio aún contiene mucha información sin conocer o analizar, el fin del planeta es una probabilidad que no se sabe exactamente cuándo podría pasar o por qué situación.
La Tierra se ha expuesto a diferentes riesgos como el calentamiento global, amenazas de meteoritos, de rayos solares, entre otros aspectos que ha podido detectar James Webb. De esta manera, el telescopio James Webb sería ese elemento que podría grabar el fin del planeta, tal y como sucedió con una estrella envejecida que absorbió a un planeta.
Por su parte, el telescopio espacial NEOWISE de la NASA también detectó como una estrella que “se apagó” se acercó a un planeta consumiéndolo. Esta, en su proceso de envejecimiento, llegó a ser una gigante roja donde puede expandirse por más de cien mil años hasta llegar al punto final de iluminación. El planeta al que se acercó tenía un tamaño similar a Júpiter, donde la energía que liberó hizo que todo este proceso se pudiera apreciar hasta volver a tener su estado anterior.
¿Cómo se detectó la destrucción?
Los científicos que se encontraban en Instalación Transitoria de Zwicky, en el Observatorio Palomar, en California, fueron los primeros en notar el destello de luz en el espacio, la que claramente fue la destrucción del planeta. El telescopio NEOWISE también fue testigo de este destello por su luz infrarroja, que detecta el calor, donde evidencio el brillo que venía desde hace un año aproximadamente, una vez sucedió la destrucción se visualizó un polvo a partir del gas que salió del planeta una vez se destruyó.
Este tipo de acontecimientos permiten que los científicos puedan analizar y comprender la destrucción de sistemas solares y estrellas por su envejecimiento y la amplitud que pueden tener en años antes de su destrucción. Según datos, se habla de que el Sol, uno de los cuerpos más importantes del sistema solar al que pertenece la Tierra, en unos 5 mil años podría expandirse tanto que tendría un proceso similar de destrucción, al agrandarse hasta 100 veces más de su tamaño actual, destruyendo así a Mercurio, Venus y parte del planeta Tierra.

Por ende, los telescopios que se encuentran en el espacio serían los testigos de la terminación de un planeta, como fue el caso del telescopio NEOWISE, el cual tiene como misión rastrear un sinfín de objetos que se acercan a la Tierra y enviar las alertas para que los científicos puedan seguir realizando sus análisis y pruebas de misiones que llevan ya un par de años con este telescopio, específicamente desde 2009, fecha de su lanzamiento.