¿Los pulpos son una forma de vida extraterrestre? 

Un equipo formado por 33 investigadores de las más prestigiosas universidades del mundo, entre ellos Edward Steele y Chandra Wickramasinghe, han publicado en la revista Progress in Bophysics and Molecular Biology, un artículo estremecedor.

Los expertos hacen una suposición de que la denominada explosión cámbrica que tuvo lugar hace alrededor de 540 millones de años fue resultado de la intervención extraterrestre, lo que quiere decir que unos virus alienígenas, llegaron a nuestro planeta en un meteoro, infectando a calamares, haciendo que estos evolucionaran hasta convertirse en pulpos.

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Sin embargo, esta no sería la única versión, pues también dicen los investigadores que fueron los huevos de pulpos lo que llegaron a la Tierra con los meteoritos.

La investigación se llevó a cabo bajo la teoría de la Panspermia, en la que dice que la vida en la Tierra surgió gracias a cometas que impactaron contra la superficie y que trajeron consigo organismos vivos.

Basados en ello, escogieron a los pulpos, como posibles invasores extraterrestres, debido a su aspecto peculiar, y que pese a ser moluscos su inteligencia es sorprendente. Además, de tener la capacidad de cambiar de color y de forma.

Dichas características, según los científicos, podrían corresponder a un organismo terrestre del futuro o bien a un extraterrestre.

Aunque este nuevo estudio titulado 'Causa de la explosión del Cámbrico: ¿Terrestre o cósmica?', parece una locura, ha sido acogido con cierta prudencia por parte de la comunidad científica.

Los investigadores presentan junto a su trabajo una enorme cantidad de evidencias, pruebas que otros científicos han obtenido pero que no se han atrevido a debatir, desde el hallazgo de bacterias y microorganismos en la extratosfera a la presencia de moléculas orgánicas en cometas.

Por otro lado, también hay varios estudiosos que no tardaron en cuestionar esta conclusión a la que han llegado los investigadores, tal es el caso de Mark Carnall, el experto del Museo de Historia Natural de Oxford, quien indicó que ninguno de los autores del estudio es especialista en zoología. Para muchos, como este experto, aún hacen falta evidencias para confirmar esta teoría de los pulpos.