El papel de Yáser Asprilla en el Girona

Yáser Asprilla fue uno de los grandes fichajes en el mercado de verano europeo de la temporada pasada, con la llegada al Girona.

Yáser Asprilla en el Girona. Foto: EFE
Yáser Asprilla en el Girona. Foto: EFE

Yáser Asprilla fue uno de los grandes fichajes en el mercado de verano europeo de la temporada pasada, con la llegada al Girona.

Uno de los grandes fichajes en el mercado de verano europeo de la temporada pasada fue la llegada del prometedor extremo colombiano Yáser Asprilla al Girona, que debía disputar la Champions League, procedente de un Watford que no es capaz de regresar a la Premier League y que no podía ofrecer al colombiano perspectivas de crecimiento en Championship. El cuadro catalán pagó unos 18 millones de euros por el prometedor Asprilla y esperaba que el jugador creciera y ayudara al equipo a obtener unos mejores resultados en la Champions League.

Yáser parecía llamado a experimentar un crecimiento espectacular y fue, seguramente, el fichaje más ilusionante del equipo español en ese verano previo a la campaña 2024/25, pero la temporada pasada acabó siendo muy complicada para el equipo gerundense y también para el joven cafetero, que mostró chispazos de lo que puede llegar a ser, pero no tuvo la consistencia ni la regularidad necesarias. El Girona, pese a tener buenos momentos, cosechó unos resultados decepcionantes en la fase liga de la Champions League, y acabó apeado de la competición, lo que, junto a una epidemia de lesiones, castigó duramente a un equipo que estuvo cerca de los puestos de descenso en la liga, contexto en el que a Asprilla le costó brillar.

Esta temporada, su segunda en la liga española, comenzó con Asprilla más asentado y adaptado en el equipo. El jugador, que en noviembre cumple 22 años, sigue trabajando para explotar bajo las directrices de Míchel, un técnico que suele mimar y apoyar con acierto el talento ofensivo, por lo que se puede pensar que el prometedor extremo está en un buen lugar para crecer, tan sólo necesita trabajar duro, paciencia, tiempo y libertad creativa, y está en un equipo en el que comparte vestuario con otra de las grandes joyas colombianas, el centrocampista Jhon Elmer Solís, que estuvo cerca de irse a la Premier League en enero, pero que finalmente se quedó para crecer en el ilusionante club catalán.

A pesar de todo ello, el Girona ha tenido un inicio difícil de curso y tardó ocho jornadas en sumar su primer triunfo en la liga española, por lo que tampoco Asprilla está pudiendo brillar como le gustaría en un equipo que ha sufrido mucho en pocas semanas de campaña. El extremo colombiano no sumó ningún gol ni ninguna asistencia en esas primeras ocho jornadas del campeonato español. Míchel confía en él, y Asprilla ha sido titular en cinco de esos ocho partidos, pero fue sustituido al descanso en dos de esos cinco, por expulsiones de compañeros de equipo, con lo que el ex del Watford no ha disputado los minutos que debería haber jugado, y no es por su culpa. El equipo gerundense también ha sufrido bajas sensibles en el tramo final del mercado de fichajes, como la del central checo Krejci o la del centrocampista venezolano Yangel Herrera, por lo que el equipo ha tenido que irse recomponiendo sobre la marcha.

Con todo, hay preguntas comprensibles en el horizonte para el joven extremo cafetero, una de las grandes promesas del fútbol latinoamericano, y es que, estando su calidad fuera de toda duda, está por ver si es uno de los líderes que necesita el Girona para regresar a Europa y recuperar su estatus de equipo de moda en La Liga EA Sports. Todo ello, además, teniendo en cuenta el gran trampolín que el Girona es, tanto por su exposición en una liga como la española como por la pertenencia de la entidad catalana al grupo City, lo que facilitaría su desembarco en el Manchester City de Guardiola, como ya sucedió con el brasileño Savinho, al que Asprilla sustituyó en el Girona.