Compañía convierte las cenizas de un ser querido en diamantes

La empresa Algordanza, con sede en Suiza, ha decido llevar las cenizas a un plano más fascinante a lo que ellos llaman el “diamante de los caídos”, un proceso que permite convertir las cenizas de un ser querido en un verdadero diamante.

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Este proceso comenzó en el 2004, pero en los últimos años se ha convertido en toda una tendencia mundial.

Pero, ¿cómo funciona este proceso?

La empresa se encarga de recoger las cenizas y llevarlas a su laboratorio, donde se inicia el proceso. El carbono se calienta para luego convertirlo en grafito; este se calienta a un máximo de 2.700 grados Fahrenheit y se somete a fuerzas tan altas hasta de 870.000 libras por pulgada cuadrada.

Las cenizas son tratadas sin hacer ningún tipo de manipulación en su color, el diamante va del color blanco al azul oscuro, todo depende del contenido de las cenizas del ser querido.

Los familiares del difunto pueden escoger joyas de 0.3 hasta 3 quilates y los precios pueden variar.

La compañía afirma que la transformación es posible debido a que para la creación de un diamante es necesario el carbono, y el cuerpo humano proporciona un 18 %. Durante el proceso se extrae el 2 % de carbono que queda en las cenizas.

El “diamante de los caídos” requiere de 500 gramos de cenizas, esto quiere decir que una pequeña parte del cuerpo humano deja aproximadamente entre 2.5 y kilos de cenizas, por lo que se pueden realizar unos cinco diamantes por persona.

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