10 razones para una limpieza facial con aceites

Para aplicar un aceite esencial, distribuye una cantidad equivalente a la punta de un dedo con pequeños contactos en el rostro. Después, distribuye el aceite utilizando movimientos circulares. Esta aplicación y distribución debe efectuarse sin presionar la piel.

Al emplear un aceite esencial, siempre guarda una distancia de aproximadamente 1 cm entre el final de los párpados y los ángulos de los ojos. Inicia con la frente y continúa lentamente hacia ambos lados del rostro, no importa que apliques sólo una pequeña cantidad.

Cada vez que apliques un aceite esencial en tu rostro para una adecuada limpieza facial, aprovecha para darle el mismo tratamiento a tu cuello y escote. Recuerda, los aceites esenciales nunca debes aplicarlos concentrados, sino diluidos en un aceite portador. 

Razones: 

1. Nutrientes. Un aceite esencial ayuda a reparar la piel gracias a las propiedades de la fruta, vegetal o hierba con la que está hecho, aportándole más nutrientes a la piel para conservar su estructura y elasticidad.

2. Hidrata. Regenera la piel seca porque recupera la humedad perdida durante el día, pero es importante que también bebas suficiente agua.

3. Tono de piel. Recobra y mejora el tono natural de tu piel con una aplicación frecuente, debido a sus agentes regeneradores de células y tejido, además de reducir las manchas y cicatrices.

4. Rejuvenecimiento. Las propiedades de un aceite esencial te permiten reducir y atenuar las arrugas y líneas de expresión en tu rostro.

5. Limpieza. Si lo aplicas por la mañana, ayuda a remover el exceso de células muertas generadas durante el sueño, además de brindarle frescura y brillo a tu piel. Si se aplica por la noche, te permite remover profundamente los residuos del maquillaje para una correcta respiración de la piel.

6. Relajante. Además de una adecuada limpieza facial, el aroma de un aceite esencial puede incidir en tu estado de ánimo, de acuerdo con sus propiedades, por lo que son empleados en diversas terapias alternativas, como la aromaterapia.

7. Limpia los poros. Si colocas algunas gotas de aceite, previo a tu limpieza, en agua caliente, el vapor abrirá tus poros y desalojará la suciedad y grasa. Relájate y utiliza un aceite esencial de 5 a 8 minutos de esta manera.

8. Desinfectan. Algunos aceites esenciales tiene además propiedades antivirales, por lo que evitan la acumulación de bacterias y otros organismos que dañan la piel de tu rostro. Por lo cual, también atenúan problemas como el acné y el excesivo sudor.

9. Aceites naturales. Si tu rostro genera demasiados aceites naturales y grasas, un aceite esencial puede equilibrar el funcionamiento de las glándulas encargadas de generar ese exceso de grasa y el ph de la piel.

10. Presentaciones. Actualmente puedes encontrar los diversos aceites esenciales en muchos productos cosméticos, como las aguas tonificantes, cremas, jabones y lociones. Incluso, por lo sencillo que es su uso, tú misma puedes aprender a elaborar estos mismos productos en tu casa para una adecuada limpieza facial.