Dolor de hombro: Cuando el dolor es normal o preocupante y cómo evaluarlo en casa

La decisión de buscar atención médica para el dolor, molestias o preocupaciones relacionadas con el hombro a menudo plantea desafíos para quienes lo experimentan. La dificultad radica en distinguir entre síntomas menores que pueden desaparecer por sí solos y aquellos que requieren atención médica inmediata, especialmente considerando los costos y la accesibilidad a la atención médica. Para ayudar en esta evaluación, se ofrecen pautas que pueden orientar sobre cuándo es apropiado buscar una consulta médica.

En ocasiones, todos experimentamos rigidez y dolor, ya sea por un esfuerzo excesivo en el gimnasio o al ayudar a un amigo con una mudanza. En la mayoría de los casos, un analgésico de venta libre, como el ibuprofeno, suele ser suficiente para aliviar el malestar a un nivel tolerable. 

Por lo general, el dolor debería mejorar gradualmente y desaparecer por completo en unos días. Sin embargo, si el dolor persiste durante varios días, no responde al tratamiento con analgésicos o es inusualmente intenso, se recomienda contactar con un médico para una evaluación más detallada.

Signos de advertencia visibles:

Según el portal simpletherapy.com existen varios indicadores visuales que podrían sugerir un problema más serio en el hombro y requerir asesoramiento médico.

• Hinchazón notable alrededor de la articulación: Si nota una hinchazón notable que rodea la articulación del hombro.
• Enrojecimiento, especialmente con calor en la articulación: El enrojecimiento, especialmente cuando se acompaña de calor al tacto en la articulación.
• Hinchazón repentina y evidente: Si hay una hinchazón que surge repentina y claramente.
• Deformidad visible o dislocación de la articulación: Si la articulación parece deformada o desplazada a simple vista.

Si identifica alguno de estos signos, es recomendable buscar atención médica. Aunque el dolor es la preocupación principal cuando se trata de problemas articulares, existen otras sensaciones físicas además del dolor que pueden indicar la necesidad de consultar a un médico.

• Pérdida repentina de la amplitud de movimiento o rigidez extrema: Si experimenta una disminución abrupta en la amplitud de movimiento o una rigidez extrema en la articulación.
• Debilidad, sensación de inestabilidad o incapacidad para mover la articulación: La sensación de debilidad, inestabilidad o incapacidad para mover la articulación de manera normal.
• Entumecimiento u hormigueo alrededor de la articulación o en las extremidades cercanas: El entumecimiento o hormigueo alrededor de la articulación o incluso en las extremidades cercanas. Esto es particularmente relevante, ya que podría indicar lesiones nerviosas por inflamación o compresión, que deben ser tratadas de inmediato para evitar daños permanentes.