Por: Redacción Vida y Estilo • Colombia.com

Oración a San Benito para alejar malas personas de tu vida

Tienes una poderosa herramienta para alejar a aquellas personas que no te convienen o que tienen malas intenciones: la oración; te enseñamos una muy poderosa, dedicada a San Benito.

“Lo que no sirve, que no estorbe”: poderosa oración para alejar malas personas. Foto: Shutterstock
“Lo que no sirve, que no estorbe”: poderosa oración para alejar malas personas. Foto: Shutterstock

Tienes una poderosa herramienta para alejar a aquellas personas que no te convienen o que tienen malas intenciones: la oración; te enseñamos una muy poderosa, dedicada a San Benito.

San Benito de Nursia o San Benito Abad, fue un monje cristiano fundador de la congregación de los benedictinos, quien dedicó toda su vida a la oración y a le religión en general, velando por difundir y hacer respetar la fe, y convirtiéndose en un gran ejemplo para muchas personas.

Se dice que este es el santo que puede ayudarte con protección, ante enemigos, brujería, males, envidias, y otro tipo de desagradables situaciones, motivo por el cual puedes solicitar su intercesión para alejar de tu vida a las malas personas, con la oración que hoy te enseñamos en esta nota, compartida por el portal ‘Oraciones Milagrosas y Poderosas’.

Oración para alejar malas personas

¡Oh glorioso padre san Benito! fervoroso y ejemplar abad, mi gran protector bondadoso y de cuantos van a ti a suplicar, aleja de mi cualquier influencia maligna, todo mal y enemigo que a mí quisiera llegar y libérame de los peligros del alma y cuerpo. Intercede por mí ante el Señor, oh santo bendito para que por su infinita compasión alivie mis sufrimientos y remedie las serias dificultades por las que paso.

Aparta, condena y rechaza, por la poderosa intercesión de la Santísima Cruz, toda mala persona, adversario o contrario, cercano o lejano, visible o invisible, conocido o desconocido, y toda malicia que puedan dirigir contra mi persona, contra mí familia, mis amistades y mis allegados.

Líbrame de fatídicas herejías, de magias y misas negras de maldiciones, encantamientos, conjuros y hechicerías, aleja de mi persona todo enemigo, aleja al violento, al mentiroso, al envidioso, al mal vecino, al egoísta y al traidor; protégeme de la ira, el odio, los celos y el rencor, de las malas lenguas, los enredos y difamación, no permitas que me ataquen física o mentalmente.

Aparta de mi lado a quien me quiera perjudicar en mi vida cotidiana, en el trabajo, en el amor, en mis ocupaciones o en el hogar, líbrame de todo daño y perversidad, en especial de esto que me causa preocupación: (hacer ahora con mucha fe la petición).

Te lo pido con toda confianza, apelando a tu poder y seguro-a de tu bondad y comprensión hacia nosotros, por favor, tú que fuiste santo y fervoroso, que no antepusiste nada ante Cristo desde que lo hallaste en la oración, concédeme tu amable y muy eficaz intercesión.

Glorioso padre san Benito, santo confesor de Señor, por tu poder ilimitado sobre los poderes dañinos protégeme, ampárame y defiéndeme de todo mal, desecha todo mal enviado, dejado, adquirido o tenido, y por la fuerza del Espíritu Santo y de la Sangre de Cristo sean derrotados y vencidos mis enemigos y alejados y desconcertados para siempre los malos espíritus.

Oh esclarecido maestro del Divino Servicio, perfecto protector y aliento nuestro, intercede por mi salud de alma, cuerpo y mente, tú que amaste a Dios sobre todas las cosas y le entregaste con humildad y sin reservas tu corazón, haz que yo también desee los bienes eternos.

Guíame para que avance por la senda de los Mandamientos, alcánzame las gracias que me son necesarias en esta vida, y en especial la de amar y tener caridad con mis semejantes; ayúdame a hallar victoria en la Santa Cruz de Nuestro Señor, enséñame a confiar en el amor de Dios, nuestro Padre y a recibir los dones benéficos del Espíritu Santo, para así alcanzar la perfección de mi vida cristiana. Amén.