Parálisis del sueño: ¿qué es y cómo prevenirla?
Aproximadamente 1 de cada 5 personas a nivel mundial; es decir, el 20%, ha tenido un episodio de parálisis del sueño.
Aproximadamente 1 de cada 5 personas a nivel mundial; es decir, el 20%, ha tenido un episodio de parálisis del sueño.
Tener un buen descanso es fundamental para conservar nuestra salud no solo física sino mental. Una gran cantidad de estudios han determinado que el sueño juega un papel muy importante en la prevención de enfermedades.
Pese a esto, hay muchos factores que pueden irrumpir en nuestro tiempo de reposo y disminuir nuestra calidad del sueño, entre estos están trastornos mentales como la depresión y la ansiedad o problemas que mezclan lo físico con lo psicológico, como es el caso de la parálisis del sueño.
Si llegaste a este artículo, seguramente alguna vez en tu vida has despertado en la madrugada sin poder moverte o hablar y con una profunda sensación de pánico. A este fenómeno se le conoce como parálisis del sueño.
A diferencia de lo que muchos creen, este sentimiento no está relacionado con el mundo paranormal, ya que de acuerdo con expertos del portal web Medical News Today, la parálisis del sueño, también conocida como parasomnia, es un trastorno del sueño que afecta a muchas personas en todo el mundo. Su principal característica es la manifestación de una sensación de inmovilidad durante el sueño o al despertar.
Los expertos señalan que este tipo de episodios, con frecuencia, llegan acompañados de experiencias hipnagógicas, es decir alucinaciones visuales, auditivas y sensoriales que generalmente ocurren durante la transición entre dormir y despertarse.
Esta condición puede ser aterradora para quienes la padecen. Sin embargo, tiene una explicación científica asociada a elevados niveles de estrés, preocupaciones, malos hábitos de sueño o trastornos más serios.
La parsimonia ocurre durante la transición desde una fase de sueño Rem hacia una fase de sueño más ligera en la que el cerebro y el cuerpo pueden no estar sincronizados del todo. Generalmente, esta transición tiene una duración de entre 20 y 40 segundos en la que el individuo puede sentir que está despierto, pero es incapaz de moverse.
En condiciones normales, cuando dormimos, nuestro cerebro envía señales a nuestros músculos para que permanezcan relajados e inmóviles. Pero cuando ocurre la parálisis del sueño, el cerebro se despierta antes de que el cuerpo esté listo y como resultado se genera una sensación de estar atrapado en el propio cuerpo.
¿Cómo evitar la parálisis del sueño?
De acuerdo con el psiquiatra Franklin Escobar, citado por el periódico El Tiempo, la clave para que este fenómeno no suceda es tener una buena higiene del sueño, estableciendo horarios para dormir y preparando un espacio adecuado para descansar, alejado de la estimulación sonora y visual.
Aunque la parálisis del sueño es aterradora, no es peligrosa y tampoco causa daño físico. Sin embargo, por lo general, tiene un impacto negativo en la calidad del sueño y en la salud mental de quienes la padecen, ya que pueden causar cansancio y somnolencia durante el día.
El portal Medical News Today da algunos consejos para que quienes sufren este trastorno con frecuencia puedan conciliar el sueño con mayor facilidad. Entre estos están:
- Mantener constancia en la hora de dormir y despertarse, incluso en los días festivos y fines de semana.
- Asegurar un entorno cómodo para dormir, con una cama y ropa de cama cómodas y limpias, una habitación oscura y fresca.
- Reducir la exposición a la luz en las noches y usar.
- No trabajar ni estudiar en la habitación.
- Evitar las siestas después de las 3:00 p. m. y por más de 90 minutos.
- Incluir una actividad relajante en el ritual para ir a la cama como leer o escuchar música relajante
- Dejar los teléfonos y otros dispositivos fuera de la habitación.
Cuando la parasomnia es inevitable, se puede recurrir a tratamientos como medicamentos que ayudan a mejorar la calidad del sueño o a terapias de meditación y relajación que promueven el buen descanso.