Por: Yuly Solis • Colombia.com

El Vaticano acepta bendecir la unión de parejas homosexuales pero sin considerarlas como matrimonio

El Vaticano acepta la bendición de las parejas del mismo sexo en un contexto informal, sin rito y sin hacerlo coincidir con una unión civil.

Actualización
El Vaticano acepta bendecir la unión de parejas homosexuales. Foto: Pixabay
El Vaticano acepta bendecir la unión de parejas homosexuales. Foto: Pixabay

El Vaticano acepta la bendición de las parejas del mismo sexo en un contexto informal, sin rito y sin hacerlo coincidir con una unión civil.

En horas de la mañana de este lunes, 18 de diciembre, el Vaticano publicó un comunicado en el que informa que ha aceptado la "posibilidad de bendecir" a parejas "en situación irregular" o del mismo sexo, sin que esto sea equiparable al matrimonio.

Según el documento publicado hoy por la Congregación para la Doctrina de la Fe, el cardenal argentino Víctor Manuel Fernández, respondió que "se puede entender la posibilidad de bendecir a las parejas en situaciones irregulares y a las parejas del mismo sexo, sin convalidar oficialmente su 'status' ni alterar en modo alguno la enseñanza perenne de la Iglesia sobre el Matrimonio".

Esta iniciativa, que sigue la voluntad del propio papa Francisco, es un cambio de postura respecto a la que la Congregación publicó en marzo de 2021, dirigida entonces por el español Luis Ladaria Ferrer, y que se mostraba contraria a que la Iglesia católica impartiese su bendición a las uniones de personas del mismo sexo.

La "Declaración" lleva por título "Fiducia Supplicans: sobre el sentido pastoral de las bendiciones" y es la primera que la Doctrina de la Fe, el antiguo Santo Oficio, publica en los últimos 23 años, desde "Dominus Jesus" (2000).

Se trata en primer lugar de un largo texto en el que se analiza el origen y sentido teológico del acto de la bendición, repasándolo desde el Antiguo Testamento y en las Escrituras.

"En su misterio de amor, a través de Cristo, Dios comunica a su Iglesia el poder de bendecir. Concedida por Dios al ser humano y otorgada por estos al prójimo, la bendición se transforma en inclusión, solidaridad y pacificación. Es un mensaje positivo de consuelo, atención y aliento", se lee en el texto.

Así mismo, se detalla que la bendición a parejas homosexuales o "irregulares", es decir, que no estén canónicamente casadas por la Iglesia, puede estar precedida por una "oración breve" en la que el cura puede pedir para los bendecidos "la paz, salud, un espíritu de paciencia, diálogo y ayuda mutua".

"No se debe ni promover ni prever un ritual para las bendiciones de parejas en una situación irregular, pero no se debe tampoco impedir o prohibir la cercanía de la Iglesia a cada situación en la que se pida la ayuda de Dios a través de una simple bendición", sentencia la Doctrina de la Fe en su "Declaración".