Concluyó búsqueda de desparecidos tras derrumbe en vía Quibdó–Medellín: se reportan 40 muertos

Tras diez días de la tragedia que apagó la vida de decenas de personas, tras el derrumbe que se presentó en la localidad de El Carmen de Atrato, en el departamento del Chocó (oeste), este lunes las autoridades dieron por finalizadas las operaciones de búsqueda, rescate y recuperación de las víctimas de la tragedia que finalmente dejó 40 muertos.

El derrumbe, que se produjo el viernes 12 de enero, sepultó a varios vehículos que estaban detenidos por un alud que bloqueó previamente la carretera entre Medellín y Quibdó, la capital del Chocó.

La gobernadora del Chocó, Carolina Córdoba, exaltó el trabajo incansable de los organismos de socorro, las fuerzas militares y de policía, los funcionarios del Carmen de Atrato, la comunidad y todo el sistema departamental de Gestión del Riesgo que atendieron la tragedia.

"El reporte final es de 40 fallecidos, todos con plena identificación. Ya no hay personas desaparecidas bajo reporte. La vía tendrá monitoreo frente a lluvias y otros factores de riesgo", informó Carolina Córdoba.

"El país en pleno nos ha acompañado a lo largo de estos días de dolor, y nos asiste el único anhelo de que nuestros esfuerzos mancomunados sean garantía de no repetición", agregó Córdoba.

Por su parte, el Instituto Nacional de Vías (Invías), continúa haciendo presencia en la zona de la emergencia y en sectores aledaños, monitoreando el volumen de lluvias para determinar cierres preventivos de las vías en caso de riesgo.

“Se desactiva el Puesto de Mando Unificado para la atención de la tragedia. Las instituciones presentes en el territorio continuarán en coordinación y vigilancia. Además, la Unidad Nacional para la Gestión de Riesgo y Desastres continuará en el municipio de Quibdó prestando atención a otras situaciones de emergencia que se han presentado en los últimos días (Inundaciones)”, finaliza el comunicado.

La tragedia despertó la solidaridad del país y de otros gobiernos que lamentaron la pérdida de vidas.
El pasado 16 de enero, cientos de personas se reunieron en Quibdó para darle el último adiós a algunas de las 40 personas fallecidas por un derrumbe. La Catedral San Francisco de Asís, a pocos metros del caudaloso río Atrato, resultó pequeña para albergar el gentío que acudió al lugar para despedir a sus familiares, amigos o conocidos.

Por esta tragedia el Gobierno colombiano declaró el estado de desastre natural, un decreto que le permitirá al Gobierno "trasladar recursos de unas partidas presupuestarias a otras" para atender esta emergencia.