Por: Luisa Soriano • Colombia.com

Papa Francisco concluye evento católico enviando un mensaje sobre la inmigración hacia Europa

El Papa Francisco llegó a Marsella tras un corto vuelo desde Roma y fue recibido por la primera ministra francesa Elisabeth Borne.

Su visita se centra en la crisis migratoria de Europa. Foto: Youtube
Su visita se centra en la crisis migratoria de Europa. Foto: Youtube

El Papa Francisco llegó a Marsella tras un corto vuelo desde Roma y fue recibido por la primera ministra francesa Elisabeth Borne.

El Papa salió de Roma con destino a Marsella, ciudad francesa donde el Pontífice estará hasta el sábado 23 de septiembre, para la clausura de los "Encuentros Mediterráneos" dedicados al tema de las migraciones.

Esta visita se marca como un hecho histórico, pues después de casi 500 años desde la época de Clemente VII, un Papa viaja a Marsella. Este evento se da en medio de los Encuentros Mediterráneos, donde se reúnen los obispos de las Iglesias que dominan el Mare Nostrum, convertido en un "cementerio al aire libre" tras los innumerables naufragios y tragedias del mar, como ha denunciado en varias ocasiones el propio Papa Francisco.

El Papa difundió un post en el que se lee: "Les pido que acompañen con la oración mi viaje a Marsella, con ocasión de los 'Rencontres Méditerranéennes"' que desean promover itinerarios de colaboración e integración en torno al Mare Nostrum, con una atención especial al fenómeno migratorio".

Antes de partir, el Pontífice envió un telegrama al presidente de la República italiana, Sergio Mattarella, en el que reitera su participación en el encuentro "que reúne a Iglesias y ciudades mediterráneas con el fin de reflexionar sobre los desafíos de la acogida, la integración y la fraternidad, para favorecer el diálogo intercultural y promover caminos de paz". El Papa envía entonces, a través del jefe del Estado, los "fervientes deseos para el bienestar espiritual y social del pueblo italiano, a quien envío de buen grado mi bendición".

Luego de hora y media de vuelo, el Papa Francisco llegó al aeropuerto internacional de Marsella a las 16:15 (horario local), descendiendo de la nave utilizando un ascensor, donde la primera ministra de Francia, Élisabeth Borne, las unidades militares de honor y el resto de los asistentes aguardaban pacientemente su llegada para la ceremonia de recepción. 

El primer compromiso será luego en el Santuario de la Nuestra Señora de la Guardia para la oración mariana con el clero. Después de este encuentro, se seguirá al pie del Monumento a los marineros y migrantes desaparecidos en el mar, donde Bergoglio recordará a los migrantes fallecidos en el Mediterráneo.

El Papa tendrá un momento de reflexión con los líderes religiosos ante la cruz conmemorativa en la plaza debajo de la Basílica de Notre Dame.

Muchos se preguntan por la ausencia del presidente de la República Emmanuel Macron a la llegada del Pontífice, la cual se debe a la coincidencia con el viaje de Estado que el Rey Carlos III de Inglaterra realiza al país. 

La visita del Papa a Marsella constituye el viaje internacional número 44 de su pontificado, con una duración de tan solo 30 horas y se guarda como la segunda ocasión en la que pisa suelo francés, tras ya haber estado en la ciudad de Estrasburgo para intervenir en el Parlamento Europeo en 2014.