Por: Alexandra Mendez • Colombia.com

Juan Manuel Santos: nuevas pruebas revelarían la entrada de dineros ilícitos a las campañas del expresidente

El expresidente Juan Manuel Santos se defendió a través de su cuenta de X, señalando que se encargará de demostrar que todas esas acusaciones son una calumnia.

Nuevas pruebas en contra de Juan Manuel Santos. Foto: Shutterstock
Nuevas pruebas en contra de Juan Manuel Santos. Foto: Shutterstock

El expresidente Juan Manuel Santos se defendió a través de su cuenta de X, señalando que se encargará de demostrar que todas esas acusaciones son una calumnia.

Tras varias investigaciones, la Fiscalía General de la Nación comprobó la entrada de dineros ilícitos a las campañas para la presidencia de Juan Manuel Santos en los periodos de 2010 y 2014. Según la entidad, Odebrecht habría aportado 3.540 millones de pesos para que el expresidente resultara vencedor en las elecciones. 

De acuerdo con información revelada por la revista Semana, tras la salida a la luz de un documento de un acuerdo entre el Grupo Aval y Corficolombiana, y el Departamento de Justicia de Estados Unidos y la Comisión de Valores de ese país (SEC), se esclareció que, en efecto, el dinero de la “multinacional de los sobornos” sí entró a la campaña de la reelección, en 2014.

En este acuerdo, se estableció el pago de un soborno por aproximadamente 3,4 millones de dólares para favorecer al expresidente. “En mayo de 2014, antes de que funcionarios del Gobierno colombiano aprobaran las nuevas obligaciones financieras para la extensión Ocaña-Gamarra, el ejecutivo brasileño acordó pagar sobornos adicionales a funcionarios del Gobierno colombiano en forma de contribuciones ilícitas de campaña”, dice el documento de la SEC en el punto 12.

De acuerdo con la Fiscalía, la entrada de estos dineros estuvo estrictamente calculada. Por ejemplo, el empresario colombiano dedicado al comercio de carros de lujo con operaciones internacionales, Eduardo López Cuéllar, recibió dineros procedentes de una cuenta de Odebrecht en Brasil, cerca de un millón de dólares. Dinero que se movió desde el nivel central de la multinacional por intermedio de empresas offshore.

Por otra parte, la Fiscalía pudo establecer que la campaña de Santos para su periodo presidencial 2010-2014 estuvo financiada con dineros de Interbolsa. Roberto Prieto, gerente de campaña de Santos, pidió una suma a la firma y esta fue cancelada directamente por la empresa a Francisco Ortiz Producciones. 

A través de varias interceptaciones de la Fiscalía al exgerente Prieto, se comprobó que el expresidente recibió un pago de 450.000 dólares por los afiches para su campaña por parte de Odebrecht, en 2010, del cual se mostró sorprendido. 

En otra interceptación, Prieto, a los gritos, le dice a Enrique Riveira, ex secretario privado de Santos: “Voy a hablar y voy a defender a su presidente, y me puede llamar el hijueputa presidente, pero no me mamo más esto (...). ¿Y sabe qué voy a hacer? Lo que no ha hecho este hijueputa Gobierno, defender al presidente”.

“Hago lo que me dé la hijueputa gana, me voy a defender, porque me tienen culiado, Enrique (...). Y porque me tienen tratado como un bandido. Ustedes tienen que tener huevos y calzones, están en la Presidencia escondidos y yo estoy en la hijueputa calle (...). Me voy a restear por ese hijueputa, porque yo tengo huevos y personalidad (...). Y con eso me enterraré, a mí me importa un culo, ya no tengo nada que perder, voy a defender la institucionalidad presidencial que se llama Juan Manuel Santos, a su presidente lo dejaron solo, y se lo dije a él el domingo, porque hay una mano de cobardes”, añadió.

Con todas estas pruebas y muchas más que tiene en poder la Fiscalía, se abre la posibilidad de que la Comisión de la Cámara reabra el caso de Juan Manuel Santos, quien esta semana se ha pronunciado a través de la red social X diciendo: “Si alguna de las partes del acuerdo entre Corficolombiana y las autoridades norteamericanas confirman la falacia que está circulando sobre el supuesto soborno que yo recibí, me encargaré de demostrar que es una calumnia temeraria, infame y contraevidente”.