Lo que los niños rescatados en la selva le han contado a su abuelo

El abuelo de los niños, Narciso Mucutuy, ha compartido detalles conmovedores sobre la valentía y determinación de su nieta mayor, Lesly. Según él, cuando Lesly se dio cuenta de que su madre había fallecido en el accidente, tomó la iniciativa de proteger a sus hermanos menores. Utilizando su instinto de supervivencia, Lesly logró cuidar de su hermanito, Cristin, racionando la poca comida que tenían y dándole agua para mantenerlo hidratado.

El emocionante reencuentro entre los niños y su abuelo ha sido un momento lleno de amor y esperanza. Los niños abrazaron a Narciso, llamándolo "papá" y expresando su deseo de irse con él. Sin embargo, el abuelo les explicó que primero debían ser examinados y recibir atención médica debido a las duras condiciones en las que estuvieron durante su tiempo en la selva. Después de esta etapa inicial de cuidado médico, los niños quedarán bajo la custodia del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) hasta que se pueda alcanzar un acuerdo para su entrega definitiva.

A pesar de la alegría y alivio de haber encontrado a los niños con vida, han surgido disputas familiares y acusaciones que han añadido una capa de complejidad a esta historia. El padre de las dos niñas menores, Manuel Ranoque, ha entrado en conflicto con la familia materna de los niños y ha realizado afirmaciones contradictorias.
 
Ranoque ha expresado su preocupación por el acceso limitado que ha tenido a sus hijos, afirmando que solo le han permitido ver a los niños menores y planteando dudas sobre la veracidad de lo que supuestamente Lesly habría dicho sobre su madre. Estas diferencias han aunmentado las tensiones y han generado interrogantes sobre la dinámica familiar y las posibles motivaciones detrás de las declaraciones y acciones de las partes involucradas.

En medio de las disputas familiares, también se han presentado acusaciones relacionadas con presunto abuso sexual, amenazas y violencia intrafamiliar por parte de la familia de la madre fallecida. Estas denuncias han sido respondidas por Ranoque, quien asegura que trata a las dos niñas mayores como a sus propias hijas y niega cualquier tipo de violencia física, afirmando que los problemas que existían se limitaban principalmente a conflictos verbales.

Es importante destacar que, más allá de las controversias y acusaciones, La prioridad principal es el bienestar y la salud de los niños. Se espera que, con el apoyo médico y las instituciones encargadas, se recuperen, reciban el amor y la estabilidad necesarios para superar esta experiencia traumática.