Presidente Gustavo Petro considera que es exagerado hablar de racionamiento de energía

Los temores sobre los efectos negativos que pueda tener el fenómeno del Niño en Colombia crecen con los días porque los bruscos cambios en el clima, no solo en el país, sino en el mundo, hacen que la inquietud sea más grande.

El presidente de la República aseguró que a pesar de que la probabilidad de que el fenómeno del Niño se sienta en el país, este se presentará de forma leve a moderada, por lo que considera exagerada hablar de apagones en el país.

De acuerdo con el Ideam, las posibilidades de que el fenómeno del Niño se presente en Colombia son altas, pero sus consecuencias podrían ser leves o moderadas, sin embargo, el ente aseguró que estas condiciones podrían cambiar de acuerdo con las circunstancias.

El mandatario nacional dijo que hasta junio o julio podría conocerse información más precisa, pero por ahora da una ‘parte de tranquilidad’ en cuanto a la posibilidad de apagones debido a que el mayor porcentaje de la energía eléctrica generada en el país se hace a través de las hidroeléctricas.

“Para su información: la probabilidad de tener el fenómeno de El Niño, que es calentamiento del Océano Pacífico y que aleja las lluvias en el país, es de un 90%. La probabilidad más alta medida hasta ahora es que sea débil o moderado, con lo cual es una exageración hablar de apagones. En junio y julio habrá más certezas para medir el fenómeno”, indicó el presidente Gustavo Petro.

Gustavo Petro se ha referido a la elevación de la temperatura promedio en el mundo de 1.5 grados antes de la Revolución Industrial entre 1850 y 1900 afirmando que ‘hemos llegado a donde nunca debimos haber llegado’ y que se necesitan acciones conjuntas en el mundo para mitigar los impactos y transformar la situación.

Los cálculos sobre el fenómeno del Niño en el mundo no son los más alentadores porque se esperan sequías en algunas zonas como Latinoamérica y lluvias en el norte de Europa, además se advierte sobre elevación de temperaturas a partir de septiembre y todo el 2024.

Los temores sobre racionamientos de energía hacen recordar los años 1992 y 1993 en los que el fenómeno del Niño azotó con fuerza al país y fue necesario un prolongado racionamiento de energía debido a la ausencia de lluvias y al bajo nivel de los embalses.

Por ahora no hay alarma, pero es necesario que se adopten medidas previas ante la inminente llegada del fenómeno del niño al país.