Por: Paula Castro • Colombia.com

La película de Netflix que cuenta una impactante historia real y que desconcertó incluso al protagonista

La crítica fue dura e incluso se la acusó de glorificar al asesino, romanizarlo y hacer mucho hincapié en su encanto y no tanto en confrontar sus terribles acciones. 

La mujer, interpretada por Kaya Scodelario, apoyará a Bundy hasta el final del juicio. Foto: Instagram @tedbundyfascinocriminale
La mujer, interpretada por Kaya Scodelario, apoyará a Bundy hasta el final del juicio. Foto: Instagram @tedbundyfascinocriminale

La crítica fue dura e incluso se la acusó de glorificar al asesino, romanizarlo y hacer mucho hincapié en su encanto y no tanto en confrontar sus terribles acciones. 

Ted Bundy es conocido como uno de los más infames asesinos en serie de la historia de Estados Unidos, su caso literalmente revolucionó a los medios de comunicación y llegó a ser tan mediático y su historia tan conocida que su vida ha sido llevada a los libros y las pantallas en varias ocasiones. 

La historia ha sido contada desde varios puntos de vista, desde las películas que incluyen algunos hechos meramente ficticios hasta títulos basados en la historia real, cómo documentales dedicados a explorar su figura desde puntos de vista diferentes, un poco más psicológicos e incluso más científicos. 

Aunque su historia tuvo lugar hace muchos años en 2019, Ted Bundy volvió a ser muy conocido gracias a dos títulos de Netflix. La plataforma de streaming se interesó por ambos trabajos del director y documentalista Joe Berlinger y los estrenó casi al mismo tiempo.

Uno de ellos, la docuserie Conversaciones con asesinos: Las cintas de Ted Bundy, que recorre el terrorífico historial criminal del asesino y además incluye material inédito como sus entrevistas en el corredor de la muerte en Florida; el otro, una película protagonizada por Zac Efron en la piel de Bundy que, bajo el título Extremadamente cruel, malvado y perverso, levantó ampollas en su día, recopila el portal Sensacine. 

La película, que también estaba protagonizada por Lilly Collins, Kaya Scodelario, John Malkovich y Jim Parsons, entre otros, partía del libro The Phantom Prince. My Life with Ted Bundy (1981) escrito por la propia Elizabeth Kendall, quien fuera novia del asesino sin saber que era un monstruo, girando gran parte historia en torno a su punto de vista.

Allí fue en donde nacieron las críticas, pues a pesar de que muchos elogiaron el trabajo de Berlinger al frente de la película, a la que podía ofrecer además toda su experiencia como documentalista, y también la interpretación de Efron como el asesino, también se la acusó de glorificar al asesino, romantizarlo haciendo mucho hincapié en su encanto y no tanto en confrontar sus terribles acciones. 

El personaje de Ted Bundy en la película muestra cómo era considerado un hombre atractivo, encantador y magnético, lo cual le facilitó acercarse a sus víctimas y cometer asesinatos sin restricciones a lo largo del país durante varios años. Sin embargo, también fue objeto de gran atención por parte de la sociedad y los medios de comunicación cuando su caso salió a la luz y durante su juicio.

"No me gusta interpretar a un asesino en serie ni nadie de esta naturaleza glamurizándolos de ninguna manera...No glorifica los asesinatos. Es importante que la gente sepa esto", respondió Zac Efron refiriendose a las críticas en una entrevista con The Ellen DeGeneres Show. 

Imagen de la película de Bundy. Foto: Instagram @tedbundyfascinocriminale

En su defensa, Efron quiso destacar que, de hecho, lo que hace la película es profundizar en el privilegio blanco dentro del sistema judicial: "Ted Bundy era un tipo blanco, una persona blanca, así que hablamos de privilegio blanco. Lo que le hizo salirse con la suya entonces, nadie podría hacerlo a día de hoy".

No obstante, el actor también admitiría que al principio tuvo muchas dudas al respecto de interpretar al personaje: "Tenía muchas reservas sobre interpretar a un asesino en este género cinematográfico", confesó en su visita a The Graham Norton Show. "No estaba interesado en glorificar nada... Simplemente no quería lanzarme a algo que pudiera verse como un intento desesperado de intentar cambiar mi imagen. Fue una experiencia única y no lo que todos esperan. Me enorgullece".