Gregorio Uribe: sabor y sentimiento caribe para la música en los Estados Unidos y el mundo

Gregorio Uribe es un músico universal que tiene muy claro cuál es la música que más le gusta. Este bogotano es un apasionado por todos los ritmos, pero no puede desprenderse del sabor Caribe, porque, aunque haya nacido en la tierra fría de la sabana, la magia y el color de la costa Atlántica los lleva impregnados en su espíritu.

Uribe es un músico especializado en percusión, e hizo parte de producciones musicales de diferentes y reconocidos artistas colombianos como Carlos Vives y Jorge Villamizar, pero también de consagrados latinos como Rubén Blades, además, ha logrado llevar su música a reconocidos y afamados recintos como el Madison Square Garden de New York y el Carnegie Hall.

El acordeón se metió en el corazón de este hombre que tiene nombre y aspecto de músico clásico que, de embajador del sabor caribe colombiano, con este instrumento logra sacar notas de alegría que son disfrutadas por el público internacional, que, con los años se ha vuelto fiel seguidor de sus creaciones, las cuales son un trozo de la patria en otras latitudes.

Uribe estudió en el distinguido Gimnasio Moderno de Bogotá, la institución que se ha encargado de educar a presidentes y personalidades más distinguidas del país, pero él le ponía alegría a ese ambiente refinado con su música, especialmente la caribeña, por la cual siente especial debilidad.

El Berklee College of Music lo tuvo en sus aulas y luego se fue para la gran manzana para continuar con su proceso musical que lo ha llevado desde la composición, pasando por la interpretación y también por el canto, razones de calidad que lo han considerado como uno de lo 100 colombianos más exitosos en el extranjero.

Este músico que cada vez se hace más reconocido, es un enamorado del jazz y tiene su propia Big Band, solo que esta tiene un toque muy especial, cuanta con los sonidos propios del Caribe colombiano en su repertorio, con el cual ha conquistado el gusto de los norteamericanos.

Su talento ha sido reconocido por músicos y también por los medios internacionales, el New York Times ha catalogado su música como “la inmersión más completa en los sonidos de Colombia”, razones que lo hacen trabajar con más ánimo y amor por una patria que jamás olvida, así viva en el exterior, por eso está de aquí para allá con su acordeón y sus partituras listas.

Aunque Gregorio Uribe esté “haciendo mucho ruido” en el exterior con su música, paradójicamente su trabajo ha sido una labor callada que solo busca enaltecer el significado de una patria, que a través de sus sonidos le muestra al mundo su alma y corazón.