Significado de los ladridos de tu perro: ¿qué quiere decir, según algunos detalles?

Son numerosos los métodos empleados por los perros para comunicarse con sus dueños o con otras personas, teniendo en cuenta que no comparten el mismo lenguaje con los seres humanos; es por esta razón que el movimiento de la cola, la posición de las orejas, la acomodación de su cuerpo, y hasta los ladridos y los gruñidos, tienen un mensaje específico que debes aprender a comprender.

En lo que a los ladridos se refiere, son muchas las personas que los relacionan con algo molesto o con un comportamiento rebelde de los caninos, sin embargo, lo que pocos saben es que existen varios tipos y que cada uno de ellos tiene un significado diferente, pues lo usan en situaciones distintas y para expresar emociones completamente diferentes.

Precisamente, si tienes el privilegio de tener uno de estos peluditos en casa, habrás notado que en ocasiones puede ladrar cuando está feliz, pero también hacerlo cuando está molesto o nervioso; pero entonces, ¿cómo aprender a identificar qué es lo que está sintiendo?

Lo primero que debes tener en cuenta es que en cada panorama su ladrido vendrá acompañado de otros detalles en su expresión corporal, pero si lo que deseas es conocer el significado de este sonido, aquí te enseñamos algunos de ellos, compartidos por el portal experto ‘Filosofía Animal’.

Ladrido de amenaza

Cuando se enfrenta a estímulos que considera podrían ser una amenaza, como personas, objetos, otros animales o situaciones, emitirá un ladrido para demostrar su nerviosismo, estado de alerta o su intención de defenderse. Suele ser un sonido en tono grave, acompañado con musculatura tensa, pelos erizados, movimientos de cola muy lentos, o mostrar sus dientes.

Ladrido para defender territorio

Sí se trata de un canino territorial, intentará defender lo que es suyo, bien sea un espacio, un objeto o incluso una persona, pues considera que hay un potencial competidor. Será un ladrido similar al de amenaza.

Ladrido por estrés

Cuando tu perro se encuentra expuesto a situaciones que no encuentra placenteras o cómodas, lo cual compromete su bienestar emocional, también puede ladrar. Serán varios ladridos cortos, pero continuos, y puede que no lo veas tenso, pero sí nervioso.

Ladrido por juego

No todas las situaciones en las que se presentan ladridos son malas, en ocasiones solo lo hacen para invitar a una persona o a otro animal a jugar; suelen ser ladridos cortos, pero agudos, acompañados de saltos, movimientos rápidos de la cola, y hasta la popular “reverencia”.

Ladrido por excitación

La sobreestimulación de tu perro también puede dar paso a los ladridos, en diferentes situaciones; estos últimos serán similares a aquellos que emite cuando busca juego, pero en esta ocasión estarán acompañados de un jadeo excesivo y hasta de la monta.

Ladrido por aburrimiento

Incluso en aquellos momentos en los que tu perro se siente aburrido y desea llamar tu atención para que sus necesidades biológicas y comportamentales sean cubiertas, puede ladrar. Este sonido lo hará frente a ti, o solo si es que no hay nadie en casa, y no cesan hasta conseguir lo que desea.

Como estos, tu mascota puede tener muchos otros motivos para emitir sus ladridos, motivo por el cual siempre debes prestar mucha atención al escenario en el que se presentan, para comprender qué es lo que desea, y a su lenguaje corporal, para que dicha interpretación sea mucho más sencilla.