'Baño de bosque' la tendencia turística que conecta con la naturaleza junto a otros procedimientos

Bogotá es la capital colombiana donde es normal encontrar caos vehicular, estrés por el transporte público, en el trabajo, por las multitudes y algunos otros detalles, sin embargo, en sus alrededores es posible encontrar escenarios de tranquilidad.

Pensar en que esta ciudad tiene espacios rodeados de bosques donde solo se respira naturaleza y se viven escenarios de tranquilidad y hasta técnicas medicinales junto a la madre naturaleza puede ser difícil, pero si los hay. El concepto de baños de bosque ha venido creciendo poco a poco y se trata de una técnica medicinal alternativa la cual evita y también cura enfermedades físicas y mentales.

Esta también se ha convertido en una tendencia turística para aquellos viajeros que buscan un espacio de serenidad y Bogotá actualmente cuenta con 31 millones de hectáreas de bosque protegidas, según el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible.

Aunque Colombia hace parte de los países donde los turistas vienen a realizarse procedimientos estéticos, otras actividades, como el Yoga o el mindful travel, han aportado un 15% a las visitas del país entre los años 2019 al 2023. Entre estos visitantes, Rita Kotov, una alemana que conoció este país y decidió aportar al desarrollo económico y la salud, creó Metanoia, un campo para realizar sesiones de shinrin yoku (baños de bosque), ubicado en La Calera, Cundinamarca.

“El paisajismo naturalista de Colombia, además de encantar a propios y extranjeros, posee propiedades altamente impactantes para el beneficio del ser humano que se comprueba fácilmente si se cuenta con orientación interdisciplinaria, es decir, con profesionales del área de la salud convencional y alternativa, expertos en biofilia, permacultura, entre otras ramas de las diferentes ciencias”, afirma Rita Kotov.

Rita es especialista en neurociencia aplicada y afirma que este proceso activa las células natural killer, la cual ayuda a la ampliación de las proteínas anticancerígena al estar en un espacio al aire libre y forestal. Allí también se trabajan aspectos como la salud mental y del corazón de los pacientes, pues esto ayuda a regular el estrés, la presión arterial, el nivel de cortisol, la ansiedad y otras patologías psicológicas frecuentes.