Capturan en Malasia dos ladrones de casas y joyas colombianos miembros de una banda

Los delincuentes colombianos en países tan lejanos como Malasia son una realidad, pues los ladrones de nuestro país no solo operan en tradicionales destinos de Europa o América, sino que siguen siendo los más negativos embajadores de un país que quiere zafarse del estigma de contar con criminales de todos los pelambres.

En Malasia, país de Asia, un grupo de ladrones de joyas, en el cual dos de sus miembros cuentan con nacionalidad colombiana, estaba siendo investigado por las autoridades de esta nación durante cerca de tres meses, para finalmente, ser capturados en una operación desarrollada en Kuala Lumpur.

En el seguimiento que las autoridades malayas realizaron al grupo de colombianos se pudo determinar que estos realizaban labores de ´inteligencia´ al pasear por diferentes barrios, en especial, habitados por personas adineradas, para conocer cuáles casas podrían ser robadas con mayor facilidad.

Repartidores de comida

Los delincuentes se desplazaban en una camioneta simulando ser repartidores de comida y desde este vehículo podrían darse cuenta de las residencias que se encontraban sin nadie en su interior para ingresar y robarlas.

Los ladrones robaban lo que representara valor, pero tenían especial debilidad por las joyas, y dos nacionales fueron arrestados en el aeropuerto cuando pretendían huir hacia Tailandia, en el grupo también había miembros malayos, dos hombres y dos mujeres, una de ellas, la jefe y reclutadora principal de delincuentes.

La Policía de Malasia indicó que la banda delincuencial podría ser la autora de 19 robos, 10 de ellos realizados en la ciudad ubicada al sur del país llamada Selangor y 9 más en Johor. 

Cerca de 1,9 millones de ringitts, moneda de Malasia, equivalente a 1.600 millones de pesos aproximadamente, fue la cifra de lo robado por la banda y estaba representada en relojes de lujo, joyas y piedras preciosas.

La investigación policial logró determinar que los colombianos ingresaban a las casas, sustraían los elementos de lujo y los entregaban a la líder de la banda, quien contaba con los contactos entre los comerciantes de Kuala Lumpur y el mercado negro, para vender los artículos robados.

Los delincuentes colombianos fueron detenidos y se les incautó un cargamento compuesto por 64 relojes de lujo, 8 bolsos de marca, dinero en efectivo y herramientas y materiales con los que lograban abrir y forzar puertas y cerraduras.

A los detenidos también se les encontraron pasaportes de 7 naciones entre las que se encuentran Guatemala, Canadá, Eslovaquia, México, Francia, y se encontraban a nombre de José David Mejía.

Los colombianos se encontraban en Malasia con un permiso de visita temporal, lo que indica que no residían en este país y se investiga si en otros países también operaban.