Donald Trump reaccionó a la elección de Robert Prevost como León XIV: "el primer papa americano"

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, felicitó el pasado 8 de mayo al cardenal Robert Prevost por su elección como el nuevo papa de la Iglesia Católica, al que se conocerá como León XIV. En un mensaje en su cuenta de Truth Social, Trump calificó el nombramiento como una “emoción” y un “gran honor” para el país, al tratarse del primer pontífice estadounidense de la historia.

“Es un honor que sea el primer Papa estadounidense”, escribió Trump, quien también expresó su deseo de encontrarse próximamente con el nuevo pontífice. “¡Será un momento muy significativo!”, añadió el exmandatario.

La elección de Prevost como el papa número 276 marca un hecho sin precedentes en la historia del Vaticano. León XIV, de 69 años, es oriundo de Chicago y posee además la nacionalidad peruana. Su elección ha sido celebrada tanto en Estados Unidos como en América Latina, donde ejerció su labor pastoral durante años.

El vicepresidente estadounidense, J.D. Vance, también se pronunció: “enhorabuena a León XIV, el primer Papa americano, por su elección. Estoy seguro de que millones de católicos estadounidenses y otros cristianos rezarán por el éxito de su labor al frente de la Iglesia. ¡Que Dios le bendiga!”

Por su parte, el secretario de Estado, Marco Rubio, afirmó que Estados Unidos espera “profundizar su duradera relación con la Santa Sede con el primer pontífice estadounidense”. En un comunicado, Rubio expresó sus “más sinceras felicitaciones” y destacó la importancia de este momento para la Iglesia Católica: “este es un momento de profunda importancia para la Iglesia Católica, que ofrece renovada esperanza y continuidad en medio del Año Jubilar de 2025 a más de mil millones de fieles en todo el mundo. El papado conlleva una responsabilidad sagrada y solemne”.

¿Cuáles son los retos de Robert Prevost como nuevo papa de la Iglesia Católica?

Robert Prevost fue elegido tras dos días de deliberaciones del cónclave en la Capilla Sixtina, convirtiéndose en una figura de consenso. Su perfil moderado y su experiencia global, tras décadas de servicio en América Latina, Europa y Estados Unidos, han sido destacados por medios internacionales.

El nuevo papa apareció por primera vez ante los fieles desde el balcón de la Basílica de San Pedro el 8 de mayo, saludando con sencillez bajo el nombre de León XIV. Durante su ministerio previo, lideró el Dicasterio para los Obispos y fue arzobispo emérito de Chiclayo, en el norte del Perú.

Con una Iglesia dividida por tensiones internas, la elección de León XIV es vista como un intento de tender puentes y dar continuidad a las reformas iniciadas por su predecesor, el papa Francisco. “No podemos parar, no podemos retroceder”, dijo el mes pasado. “Tenemos que ver cómo el Espíritu Santo quiere que la Iglesia sea hoy y mañana...”