Durante entrenamiento de rescate colapsa glaciar en montaña peruana y desata emergencia
La emergencia ocurrió en la montaña Vallunaraju cuando un bloque de hielo se desprendió inesperadamente. En redes circula el video del rescate.

La emergencia ocurrió en la montaña Vallunaraju cuando un bloque de hielo se desprendió inesperadamente. En redes circula el video del rescate.
Lo que comenzó como una jornada de práctica en técnicas de rescate en alta montaña terminó en una carrera contrarreloj por la vida.
En la cima del nevado Vallunaraju, ubicado en la cordillera Blanca del Perú, un grupo de rescatistas enfrentó una situación crítica cuando un glaciar colapsó súbitamente, desencadenando una peligrosa emergencia en medio del entrenamiento.
El incidente ocurrió cuando los equipos realizaban simulacros controlados en la zona. Sin previo aviso, una enorme masa de hielo se desplomó, abriendo una grieta profunda entre los bloques de nieve.
Las imágenes que han circulado en redes sociales muestran a los rescatistas intentando mantener el equilibrio sobre superficies inestables, mientras aseguran con cuerdas la zona para evitar nuevas tragedias.
Este hecho no solo encendió las alarmas entre los organismos de socorro locales, sino que también puso sobre la mesa el creciente riesgo que representan los glaciares inestables en la región andina, agravado por el cambio climático y el aumento de temperaturas que debilita las capas de hielo.
Subtema: La montaña y el riesgo de entrenar en altitudes extremas
El Vallunaraju, situado a más de 5.600 metros sobre el nivel del mar, es uno de los puntos más visitados por alpinistas y brigadas de rescate debido a su accesibilidad para prácticas de alta montaña.
El acceso al campo morrena del Vallunaraju ,ubicado aproximadamente a los 5,000 msnm, requiere de una caminata exigente por un sendero mixto de roca y tierra. La ruta presenta pendientes marcadas, algunas de ellas poco recomendables para personas con vértigo. Desde la quebrada Llaca, donde los vehículos dejan a los escaladores, se calcula entre tres y cuatro horas de ascenso hasta el campamento base.
El itinerario hacia la cima comienza entre las dos y tres de la madrugada. Para completar el trayecto con seguridad se necesita experiencia previa, dominio de técnicas de uso de crampones, piolet y una adecuada preparación física. El trayecto completo puede requerir hasta cinco horas, seguido de un descenso constante hasta que se reencuentre con el vehículo en la quebrada.
Sin embargo, su belleza escénica contrasta con el peligro latente que representa la inestabilidad de sus glaciares, especialmente durante la temporada de deshielo.
Hasta el momento no se han reportado víctimas fatales, pero la situación puso en evidencia la necesidad de reforzar protocolos de seguridad en ejercicios de entrenamiento, incluso cuando se trata de equipos altamente capacitados.
El rescate culminó con éxito y los participantes lograron descender sin mayores contratiempos, aunque con una lección clara: en la montaña, incluso la preparación más rigurosa puede verse superada por la fuerza impredecible de la naturaleza.