Ecuador escogió a su nuevo presidente

El candidato de centroderecha Daniel Noboa, de 35 años, se convertirá en el próximo presidente de Ecuador, luego de una elección impulsada por preocupaciones sobre el aumento de la violencia y el empeoramiento de la situación de seguridad en la nación latinoamericana. Noboa, hijo de un magnate bananero, era legislador antes de que el presidente saliente Guillermo Lasso disolviera la legislatura y convocara elecciones anticipadas, una situación nunca antes vista en el país.

Durante la jornada electoral de este domingo 15 de octubre, más de 10 millones de personas han votado en los comicios presidenciales. Según las cifras entregadas por el Consejo Nacional Electoral del Ecuador (CNE), Daniel Noboa obtuvo el 52,01% de los votos; 5,165.299 Por otro lado, su contendiente política, la candidata de izquierda y favorita en la primera vuelta, Luisa González, obtuvo el 47,99% de los votos; 4.766.254.

Entre las promesas del candidato por el partido Acción Democrática Nacional, se está su compromiso para crear más oportunidades laborales para los jóvenes, además de atraer más inversión extranjera, utilizar la tecnología para combatir el crimen y ha sugerido varias medidas anticorrupción, incluidas sentencias por evasión fiscal. Tras conocer su triunfo, Noboa entregó declaraciones a medios locales, agradeció a Dios y a su familia por el apoyo:

“Agradezco también a todas aquellas personas que han sido parte de un proyecto político nuevo, joven, improbable, un proyecto político cuyo propósito era devolverle una sonrisa al país”, dijo el presidente electo.

Su rival a vencer, Luisa González, del partido Movimiento Revolución Ciudadana, y quien tenía el respaldo del expresidente izquierdista Rafael Correa, se presentó con la promesa de mejorar el gasto público y los programas sociales, promesas que la llevaron a ser la más fuerte de los aspirantes en la primera vuelta, pero que no le alcanzó para llegar al palacio de Carondelet en esta elección final.

La seguridad fue estricta durante la votación de este domingo, con decenas de miles de agentes de policía y personal del ejército estacionados en los colegios electorales de todo el país. Un protocolo bastante especial debido a los problemas de seguridad electoral que ha presentado Ecuador en estos comicios.

Los retos del nuevo presidente

Daniel Noboa será un presidente con una característica particular, no gobernará el país por cuatro años, como tradicionalmente ocurre, sino hasta mayo del 2025, fecha en que debía terminar su mandato el actual presidente Guillermo Lasso. Esto se debe en principio al llamado a muerte cruzada hecho por Lasso en mayo pasado luego de disolver el congreso ecuatoriano que buscaba destituirlo. Todo esto supone una crisis política sin precedentes, pues el país nunca antes había llegado a una instancia similar.

La seguridad en Ecuador ha sido tema de la agenda noticiosa durante el último año; el orden en las cárceles del país se ha visto numerosas veces alterado por motines y descontrol. La seguridad de los aspirantes a la presidencia del país ha sido tan vulnerable que uno de los más opcionados a lograr llegar al palacio de carondelet, Fernando Villavicencio, fue asesinado a manos de unos sicarios, de los cuales la mayoría son de origen colombiano.

Antes de que Ecuador se transformara en uno de los países más peligrosos de la región, era conocido como un lugar relativamente pacífico, ubicado entre dos de los países más afectados por el narcotráfico; Perú y Colombia. Ahora el país ecuatoriano también padece de la presencia del narcotráfico y la delincuencia en altas tasas.

Noboa deberá trabajar a contrarreloj para poner orden en el país en temas como seguridad, política antidrogas y crisis diplomática interna, un reto en cuanto menos difícil, pero que según el candidato, está preparado para asumir, en su nuevo cargo, como jefe de estado.