Por: Redacción Actualidad • Colombia.com

El caos se apodera de Suráfrica con saqueos y decenas de personas muertas

Desde el pasado jueves se presentan saqueos y acciones vandálicas en Suráfrica, que hasta el martes 13 de julio arrojaban la cifra de 72 personas fallecidas, el Gobierno ha desplegado efectivos militares en apoyo a la Policía que no ha logrado contener la furia y el descontento por el apresamiento del expresidente Jacob Zuma.

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Los saqueos se han presentado en varios puntos de Suráfrica desde el pasado día jueves 8 de julio. Foto: Twitter @IOL
Los saqueos se han presentado en varios puntos de Suráfrica desde el pasado día jueves 8 de julio. Foto: Twitter @IOL

Desde el pasado jueves se presentan saqueos y acciones vandálicas en Suráfrica, que hasta el martes 13 de julio arrojaban la cifra de 72 personas fallecidas, el Gobierno ha desplegado efectivos militares en apoyo a la Policía que no ha logrado contener la furia y el descontento por el apresamiento del expresidente Jacob Zuma.

Jacob Zuma, expresidente de Suráfrica fue ingresado a una prisión el pasado jueves 8 de julio al negarse a declarar por una investigación por corrupción durante su mandato, e inmediatamente se desató la furia de la población que se tradujo en manifestaciones y enfrentamientos con las autoridades dejando inicialmente casi un centenar de personas detenidas.

Jacob Hedleyihlekisa Zuma de 79 años fue el cuarto presidente de la República de Suráfrica entre los años 2009 y 2018, este político de importante influencia en el pueblo Zulu, del que es natural, hizo parte del partido comunista y pagó prisión junto con Nelson Mandela, desde el año 1990 se convirtió en una de las principales figuras del ANC, Congreso Nacional Africano.

Zuma fue condenado por un alto tribunal del país en una decisión sin apelación y cumplir una sentencia de 15 meses por desacato, el exmandatario se entregó voluntariamente y por tal razón no fue necesario usar la fuerza, pero sus simpatizantes, y en general el pueblo Zulu, un importante grupo étnico con cerca de 10 millones de personas no manifestaron ningún agrado con la decisión judicial.

En la provincia de KwaZulu-Natal se desataron fuertes protestas y se produjeron saqueos y destrucción de propiedades privadas y públicas, hecho condenado por el propio Congreso Nacional Africano, también por el presidente Cyrill Ramaphosa, quien hizo un llamado el sábado a la calma sin lograr eco entre la población.

El caos se apoderó de la región y rápidamente se extendió a Johannesburgo, la capital económica y concentración urbana más grande del país, allí, en el suburbio de Soweto se produjeron saqueos, y en una estampida, justamente en medio de uno de estos, diez personas murieron.

El Gobierno dispuso el envío de tropas a las zonas en donde se presentan problemas para auxiliar a la policía, que no ha dado abasto para contener los hechos vandálicos que iniciaron con quema de automotores y el bloqueo de las vías.

En la tarde del martes 13 de julio se contabilizaban 72 personas muertas, pero los incidentes continúan en los townships, áreas desfavorecidas reservadas a personas no blancas, que en masa han acudido a negocios y supermercados para saquearlos, acción respondida por la policía con balas de goma.

El Gobierno insiste en que la mayoría de los fallecidos han perdido la vida en estampidas producidas en los saqueos, mientras los manifestantes denuncian una fuerte represión policial.