Presidente del Perú, Pedro Castillo, desmiente su dimisión y afirma que son especulaciones en las redes sociales

La situación política en Perú atraviesa un momento de mucha tensión debido a las especulaciones que han surgido sobre una posible dimisión del presidente Pedro Castillo, un asunto que el propio mandatario ha desmentido.

Pedro Castillo no ha tenido un gobierno fácil desde que llegó a él en julio de 2021 y se ha debido enfrentar a una férrea oposición de la derecha del país, además en siete meses de mandato ha experimentado diferentes tormentas políticas y ha realizado cambios a su gabinete ministerial en 4 oportunidades.

Hace un par de días el presidente Castillo fue mencionado en un entramado de corrupción al interior del gobierno por una empresaria investigada por presuntos delitos de lavado de activos, Karelim López dijo a la Fiscalía de su país que existe una organización criminal con tentáculos en el gobierno, ministerios y en el Congreso de la República.

Se quiere promover la vacancia del presidente y se anuncian debates de moción de censura en contra del presidente, y el partido oficialista rechaza las ‘movidas’ que se están fraguando para sacar al presidente Castillo de la Casa de Pizarro.

La bancada de Perú Libre, partido de Castillo, defiende al mandatario y denunciaron que se está buscando poner en el poder a la vicepresidenta Dina Boluarte o a la presidenta del Parlamento, María del Carmen Alva, con quien Castillo ha sostenido enfrentamientos desde hace unas semanas y de quien se dice haber organizado una reunión secreta con los grupos opositores al presidente para lograr aprobar una moción de censura en su contra.

Desde la Presidencia de Perú se ha desmentido que el presidente pretenda renunciar y agregó que esas son especulaciones que andan circulando por las redes sociales.

“Reiteramos que el mandatario indicó en más de una oportunidad que continuará con su gestión hasta el 28 de julio de 2026”, anunció la Presidencia, que también extiende el deseo del presidente Pedro Castillo para que la sociedad peruana sea “responsable” y se mantenga “unida y atenta en favor de la gobernabilidad y el desarrollo social”.

Pedro Castillo se encuentra en una difícil situación debido a la denuncia que realizó una empresaria llamada Karelim López, que en poco tiempo pasó de ser una aseadora de tumbas a una próspera empresaria conocida en las esferas del poder en Perú gracias a que estableció contactos y logró contratos con el Estado.

A Pedro Castillo se le acusa de cometer delitos de corrupción al interior del Gobierno, y dicha agrupación delictiva se encargaba de obtener dinero de las licitaciones públicas para poder pagar las deudas que el mandatario había contraído por su campaña presidencial.