Una nueva masacre en el país, una familia fue asesinada en Tierra Alta, Córdoba
Una nueva masacre en el país, una familia fue asesinada en Tierra Alta, Córdoba y las autoridades aún desconocen quienes pudieron haberla cometido.
Una nueva masacre en el país, una familia fue asesinada en Tierra Alta, Córdoba y las autoridades aún desconocen quienes pudieron haberla cometido.
Infortunadamente los asesinatos no ceden el país, el último hecho que enluta al país se produjo en el departamento de Córdoba, concretamente en la vereda San Lorenzo en el municipio de Tierra Alta.
Una familia compuesta por una pareja de esposo y su hija fueron asesinados a balazos, los vecinos de la zona escucharon las detonaciones de arma de fuego, pero no salieron a revisar debido al temor que esto ocasionó, pero al cabo de unas horas salieron para ver qué había sucedido y se encontraron con los cuerpos inertes de los habitantes de la vereda.
Cordobexia, una fundación social con fuerte arraigo en el departamento denunció la masacre y la calificó como tal debido a que los cuerpos de los esposos fueron encontrados en un lugar y el de su hija metros más adelante.
La fundación envió un mensaje al presidente de la República en el que solicitan que desmonte el paramilitarismo, sus bandas sucesoras y sus redes de apoyo teniendo en cuenta la ley 154 de 2017, en esta ley se determina la terminación del conflicto armado y se establecen mecanismos jurídicos para asegurar y facilitar la implementación y el desarrollo normativo y la construcción de una paz estable y duradera.
La fundación Cordobexia es una organización social que ha denunciado persecuciones y amenazas hacia sus integrantes debido a que ha advertido a la comunidad del departamento sobre los abusos de paramilitares y terratenientes en la zona, que han desplazado y asesinado a cientos de personas.
El año pasado la fundación denunció amenazas y también el asesinato de líderes sociales en el departamento, pero la derecha del país hizo pronunciamientos ofensivos sobre la misma, restándole importancia a sus denuncias y desprestigiando a sus líderes porque contaron desde un principio con el apoyo de líderes como Gustavo Petro e Iván Cepeda.
Este hecho de sangre en el departamento de Córdoba se convierte en la masacre número 74 en lo que va corrido de este año, un lapso enmarcado por la crisis de la pandemia del Covid-19 pero también por una violencia sin control a la que el estado parece no hacer caso.
Una vez se supo de la masacre, aparecieron las fuerzas policiales para realizar patrullajes por la zona y también se anuncian medidas para recuperar el orden público y demás.
No se conoce la autoría de los asesinos y aún no se establece la ocupación de los fallecidos para determinar si su asesinato se debió a que eran líderes sociales de la región.