Accidente de transporte 'pirata' deja siete muertos en Boyacá

Un accidente de tránsito dejó sin vida a siete personas en el municipio de San Mateo, en el departamento de Boyacá, mientras que otras doce están heridas y ya fueron trasladadas a centros asistenciales de la zona.

De acuerdo con la Defensa Civil, el hecho se dio luego de que un vehículo que transportaba a 19 personas, sin licencia alguna, se volcó hacia un abismo de 250 metros, en la vereda Guayabal. En el incidente, “siete personas fallecieron, de las cuales tres murieron en el lugar de los hechos. Otras cuatro personas murieron en centros asistenciales”, señaló el coronel Carlos Fernando Triana, comandante de la Policía de Boyacá, en conversación con Blu Radio.

“El bus era modelo 1967. Era muy antiguo, no estaba adscrito a ninguna empresa y transitaba por las carreteras veredales del municipio (…) El vehículo no tenía revisión técnico-mecánica, estaba vencida desde el 15 de septiembre de 2018. El SOAT sí estaba vigente”, informó Triana.

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Transporte pirata: una problemática más

Este accidente pone en entredicho las reacciones de las autoridades locales ante el crecimiento de los vehículos que prestan un servicio de transporte pirata en Colombia.

Y es que en los últimos días ya se han evidenciado varios casos polémicos por transporte informal en el país, como el de una ambulancia en Cali. El vehículo de salud fue descubierto por las autoridades locales no precisamente transportando a un paciente, sino que estaba funcionando como servicio ilegal de viaje para 11 personas en la ciudad.

“Al conductor se le interpuso una multa de 800 mil pesos, el vehículo fue inmovilizado y el caso está siendo investigado para determinar a qué otro tipo de sanción se debe someter”, indicó Ricardo Herrera, subsecretario de Movilidad de Cali.

Sin embargo, esta no es una lucha fácil, teniendo en cuenta que, aunque no hay un estudio que especifique el número exacto de personas que usan estos servicios, sí se puede afirmar que son cientos los colombianos que optan por lo informal ya sea por facilidad o economía.

“El bus me cobra 1.900 y me tardo casi 45 minutos, en la moto llego en menos de 25 y pago 1.000”, dijo un barranquillero al periódico El Tiempo, cuando se le preguntó el porqué de su elección.

Facilidad tecnológica

Ahora bien, hoy en día, este tipo de servicios han trascendido al mundo virtual con aplicaciones como Uber, Cabify y Picap. Solamente la primera cuenta con un poco más de 2,3 millones de usuarios en Colombia, por lo que se ha convertido en tema preocupante para las autoridades colombianas y su afán por garantizar la legalidad del transporte en el país.

Es por esto que el ministerio de Transporte ha decidido implementar la ley expedida en el Código Nacional de Tránsito Terrestre del 2002, que cita, en su artículo 26, sanciones especiales para los conductores “que presten el servicio público de transporte con vehículos particulares, salvo cuando el orden público lo justifique, previa decisión en tal sentido de la autoridad respectiva”.

En consecuencia, “a los conductores particulares que utilizan sus vehículos para la prestación ilegal de transporte público de pasajeros se les cancelará su licencia de conducción y solo podrán volver a solicitarla 25 años después”, informó la ministra  Ángela María Orozco.

De esta forma, tan solo en Bogotá, ya han sido canceladas 75 licencias de conducción de personas que han sido descubiertas in fraganti en el ejercicio del transporte informal en la ciudad.