En enfrentamiento en Bosa fue abatido presunto asesino de dos patrulleros de la policía

El asesinato de dos patrulleros de la Policía Nacional en la localidad de Bosa conmocionó a la ciudadanía de Bogotá, porque los dos uniformados, de 22 y 35 años, atendieron un llamado en el que se denunciaba un asalto a un local comercial de la zona.

En la noche del jueves fue abatido por la Policía un hombre en una de las calles del barrio Laureles en Bosa y se presume por parte de las autoridades con que pudo haber hecho parte del asesinato de los patrulleros, debido a que portaba el arma de dotación y el chaleco de servicio de uno de los uniformados ultimados con disparos en la cabeza.

La Policía Metropolitana de la ciudad de Bogotá anunció, según lo comunicó la alcaldesa Mayor de la capital de la República, Claudia López Hernández, que en una persecución que unidades policiales realizaban a dos delincuentes que habían robado previamente una motocicleta, se produjo un enfrentamiento a balazos entre los miembros de la fuerza pública y los delincuentes.

La acción de los uniformados permitió dar de baja a uno de los hombres, mientras que el otro logró escapar, se presume con que los dos hacen parte de una organización delincuencial dedicada al hurto de motocicletas que opera en la localidad de Bosa y en el municipio de Soacha.

Luego del asesinato de los dos patrulleros de la Policía Nacional el pasado domingo 4 de diciembre, la comandancia de la institución comunicó que por información que permitiera la captura de los homicidas ofrecía una recompensa de 200 millones de pesos.

Uno de los patrulleros llevaba apenas un año prestando sus servicios en la Policía Nacional y su vida se apagó muy joven cuando tenía 22 años y grandes sueños en la institución. El otro patrullero asesinado contaba con 35 años y se había destacado por su compromiso y valentía en el cuerpo uniformado de la ciudad de Bogotá.

La Policía colombiana libra una guerra sin descanso en contra de la delincuencia en todos los puntos cardinales del país, y con ocasión de las fiestas decembrinas, cerca de 1.500 efectivos llegaron a la ciudad de Bogotá para brindar protección y seguridad a la población.

Las bandas delincuenciales son desarticuladas a diario en la ciudad de Bogotá gracias al trabajo sacrificado y arriesgado de la Policía, pero lamentablemente, muchas veces sus esfuerzos no son recompensados por la aplicación de las leyes, pues un buen número de criminales detenidos resultan prontamente de vuelta en las calles, una crítica que hasta la misma alcaldesa López Hernández ha hecho a los encargados de impartir justicia.