Gobernador indígena en Nariño es una nueva víctima de minas antipersona en el país

El drama de las minas antipersona en Colombia no desaparece y a pesar de los esfuerzos que la fuerza pública realiza para desenterrar estos artefactos que tanto daño han hecho al país se siguen conociendo casos en los que colombianos de todas las edades son víctimas de esta arma que desde diferentes lugares del mundo se busca prohibir.

En zona rural del municipio de Tumaco, un gobernador indígena de la etnia Awá fue víctima de una mina antipersona cuando transitaba por un sector y esta explotó, y aunque tuvo heridas de consideración, miembros de su comunidad le salvaron la vida, pero existe la posibilidad de que pierda una de sus piernas.

Alberto García Pai, un gobernador indígena suplente de 42 años de la comunidad Guiza Sábalo se dirigía a su casa el pasado 18 de mayo y piso una mina que le produjo graves heridas y gracias a sus gritos fue escuchado por miembros de su comunidad que lo socorrieron.

Como pudieron, otros indígenas lograron trasladarlo hasta el Hospital San Andrés de Tumaco en donde recibió la atención primaria, pero la condición de una de sus piernas quedó comprometida, por lo que existe la posibilidad de que la pierda, y según su familia, esto le acarrea graves problemas psicológicos a él y a su familia.

Varias víctimas en lo que va del 2023

La organización indígena a la que pertenece el gobernador García Pai ha denunciado que en lo que va corrido del año seis miembros de su comunidad han sido víctimas de las minas antipersona que están sembradas en su territorio, porque en esta zona existe presencia de grupos irregulares armados que se disputan el control geográfico y del manejo de los negocios ilícitos.

De las personas reportadas como víctimas de las minas antipersona este año en esta parte del departamento de Nariño, la Secretaría de Gobierno del departamento advierte que el número es mayor y que en 2023 son 8 los afectados, tres mujeres y cinco hombres, dos de los cuales infortunadamente perdieron la vida.

La organización indígena en Tumaco denuncia que las minas antipersona se han convertido en un riesgo permanente para su comunidad que se desplaza por zona rural porque el territorio está sembrado con ellas corriendo constante peligro de muerte ante una inminente explosión.

La Unipa, Unidad Indígena del Pueblo Awá, le pide al Gobierno Nacional y a las autoridades que realicen campañas de desminado humanitario y así se logre que los indígenas de la comunidad no sigan siendo las víctimas de un arma creada con el único fin de acabar con la vida de las personas.