“Colombia seguirá ejerciendo soberanía en mar de San Andrés”: Duque ante fallo de La Haya

La Corte Internacional de Justicia (CIJ) consideró que Colombia ha violado “la soberanía y la jurisdicción” de Nicaragua en su propia Zona Económica Exclusiva (ZEE) al autorizar actividades de pesca en aguas nicaragüenses. 

De igual manera, determinó que Colombia violó los derechos del país centroamericano con su “interferencia con las actividades de investigación científica marina y pesquera de las embarcaciones con bandera o licencia nicaragüense y con las operaciones de las embarcaciones navales” en aguas pertenecientes a ese territorio.

Por tal razón, el alto tribunal le exigió a Colombia “cesar inmediatamente” sus actividades de pesca en el mar de ese país y su injerencia en las operaciones de investigación por parte de Nicaragua en sus propias aguas. 

En su decisión, la Corte también consideró que el decreto presidencial colombiano que estableció una "zona contigua integral" desde el continente hasta el archipiélago, en el que se omite la delimitación fijada por la misma instancia en un fallo de 2012, “no se ajusta al derecho internacional consuetudinario”.

Tras conocerse el auto de la CIJ, el presidente Iván Duque reaccionó desde San Andrés y afirmó que el país seguirá ejerciendo la soberanía sobre dichas aguas, por lo cual ordenó a la Armada mantener las operaciones militares.

“En ningún caso la presencia de la Armada es amenazante cómo lo pretendió Nicaragua desde el inicio del proceso, dicha petición fue rechazada en el fallo de excepciones preliminares que se presentó en el 2016”, dijo el Jefe de Estado. 

A su vez, agregó que “la Corte reconoció el derecho de Colombia a navegar libremente en el área para luchar contra los delitos transnacionales y el narcotráfico, desde un comienzo esa fue la posición de la defensa de Colombia y fue lo que la corte reiteró el día de hoy”. 

Iván Duque también aseguró que "la unidad, integridad e invisibilidad del archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina y los cayos y todas las islas se mantiene" y que "la zona contigua es ajustada al derecho internacional".

Además, ratificó que su gobierno, que termina el próximo 7 de agosto para dar paso a la nueva administración que se posicionará ese día, “continuará en la tarea superior de evitar que Nicaragua limite o pretenda limitar los derechos de Colombia”. 

"Nos encontramos en el Archipiélago histórico e indivisible de San Andrés. Escuchamos el fallo de la Corte Internacional de La Haya sobre el litigio limítrofe con Nicaragua. Reiteramos que en la defensa de los intereses de nuestro país no hay colores políticos ni partidistas, aquí todos somos Colombia", recalcó Duque a través de su cuenta de Twitter. 

Por su parte, el agente de Colombia ante la CIJ, Carlos Gustavo Arrieta, interpretó que el fallo permite en realidad al país “mantener la libertad de navegación en la zona y la presencia de la Armada”.

Arrieta explicó que en la determinación de la Corte hubo “un pequeño regaño por algunas operaciones de la Armada (colombiana) en alguna zona”. Sin embargo, lo entendió como que el tribunal “consideró que no eran infracciones mayores de derecho internacional y no les atribuyó consecuencia alguna” para el país. 

“Hemos logrado lo esencial para Colombia, que era mantener la libertad de navegación en la zona y la presencia de la Armada, mantener la integralidad del archipiélago, y reconocer a la comunidad raizal para que pudiera pescar en la zona. Salimos muy contentos”, aseguró ante los medios de comunicación. 

Ante la propuesta de la CIJ de buscar acuerdos bilaterales sobre la situación de la comunidad, para que esta pueda acceder y explotar sus bancos de pesca tradicionales en aguas nicaragüenses, dijo que se trata de “decisiones políticas” que deben tomar los gobiernos. 

“Vamos a analizar con mucho detalle la sentencia, a ver qué dice, y procederemos de acuerdo con eso”, subrayó y aclaró que la misma no ordena cesar la presencia de la Armada colombiana en aguas nicaragüenses. 

“Eso no es verdad, lo que dijeron es que no podíamos hacer operaciones de control del medio ambiente porque eran atribuciones de Nicaragua, pero nunca nos ordenaron que no hagamos presencia ni que salgamos de la zona, jamás, en ninguna parte”, concluyó.