¿Quién fue Jorge Eliécer Gaitán para Colombia?

Pero ¿quién era Gaitán? ¿Qué significaba este gran personaje en la sociedad colombiana para que causara tal furor su asesinato? Pues, su defensa y afecto por el pueblo hicieron que despertara el respeto, admiración, y amor de los colombianos.

El asesinato de Jorge Eliécer Gaitán es un momento inolvidable en la historia del país, y luego de 70 años, sigue siendo un ícono de esperanza, el fiel representante de aquel intento frustrado de lograr una Colombia realmente democrática, más justa y menos excluyente.

Ese 9 de abril desató una serie de verdaderas insurrecciones en diferentes lugares del país, algunas denominadas "Juntas revolucionarias", las cuales turbaron por poco tiempo el orden en la ciudad, originando lo que se conoció como el "Bogotazo". Este hecho fue aprovechado por la clase dirigente para generar violencia y caos.

Por estos acontecimientos, las autoridades ejercierón su represión contra el pueblo, ya que consideraban enemigos a aquellos que se rebelaran ante el sistema de la ultraderecha de la época. Un movimiento popular con deseos de cambiar las reglas de un juego monopolizado solo por ellos era inaceptable.

Alterno al ‘Bogotazo’, se inauguraba en la capital colombiana la IX Conferencia Panamericana, promovida Estados Unidos, la cual dio origen a la Organización de Estados Americanos (OEA). Lo que realmente se quiere resaltar es el verdadero significado de esa triste fecha, y es, la justificación plena de una política represiva, al mismo tiempo en que las tensiones sociales aumentaban en toda América latina.

Para nadie es un secreto que la historia de esta República, está sellada desde sus inicios por la violencia, genocidios, invasiones, masacres, golpes de estado y asesinatos de líderes populares, promotores del cambio, que no pertenecían a las élites oligarcas de la época; y todo ello en complicidad con Estados Unidos.

Pero, ¿qué pasó realmente el 9 de abril de 1948?

Este día la vida de Jorge Eliécer Gaitán se apagó mientras se desarrollaba en Bogotá, la IX Conferencia Panamericana, de la que surgió la Organización de Estados Americanos (OEA).

Esa tarde del 9 de abril, Gaitán tuvo uno de sus mayores triunfos como penalista al lograr la absolución del teniente Jesús Cortés, acusado por la muerte de un periodista. Gaitán tenía una cita para recibir a un grupo de estudiantes internacionales (entre ellos Fidel Castro) que se encontraban en Bogotá al margen de la Conferencia Panamericana en la que participó el general Marshall, impulsor del plan que lleva su nombre para la reconstrucción de Europa tras la segunda Guerra Mundial.

Un hombre llamado Juan Roa Sierra, lo esperó en la entrada del edificio donde se ubicaba su oficina y le propinó tres disparos con un revólver. Gaitán fue llevado a la Clínica Central donde murió a las 2:05 p.m.

A raíz del asesinato del líder popular, se suscitaron enfrentamientos entre partidarios liberales y conservadores. Las fuertes manifestaciones y la represión policial produjo un saldo de al menos 3 mil fallecidos o desaparecidas y más de 140 edificaciones destruidas en varias ciudades del país y con mayoría en Bogotá.

Tanto la Policía como el Ejército se dividieron entre quienes buscaban controlar la situación, muchas veces abriendo fuego contra los manifestantes, y quienes se sumaron a la rebelión popular. ‘El Bogotazo’ daría inicio a lo que los historiadores llaman como el punto de inflexión que impulsó el nacimiento de insurgencia guerrillera en Colombia.

Luego de una relativa calma de un poco más de 10 años, pasó a ser una guerra del Estado contra los movimientos de izquierda, que ha dejado más 200 mil muertos y 5,3 millones de desplazados en más de medio siglo, según cifras oficiales.

La mayoría del pueblo colombiano estaba convencido de que Gaitán era su digno representante en el poder. El líder liberal tenía ideas en pro de los intereses de los más desposeídos, sobre todo los campesinos, y buscaba quitarle los indignantes privilegios de la oligarquía.

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Ma. Gabriela Garofalo - Colombia.com