Armero: Leopoldo Rivera, el voluntario que avisó de la tragedia

Leopoldo Rivera, el voluntario de la Defensa Civil de Venadillo fue quien dio aviso a Colombia de la tragedia de Armero.

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Leopoldo Rivera, el voluntario de la Defensa Civil de Venadillo fue quien dio aviso a Colombia de la tragedia de Armero.

El 13 de noviembre de 1985 por la tarde, Leopoldo compartió tiempo con unos amigos empezó a caer polvillo, pero eso era algo normal en una zona como Armero.

Leopoldo partió para su casa pero le quedó la duda si ese polvillo era el comienzo de una tragedia que ya había sido anunciada. Hizo las llamadas correspondientes, incluso a Palacio (Presidencia) donde no fue tomado en cuenta.

 

Tanto se movió Leopoldo que en plena madrugada del 14 de noviembre le dieron permiso, bajo su propia responsabilidad, para visitar la zona a ver si era cierto que había pasado algo con el volcán.

El volcán señalado era el Arenas que hace parte del conjunto del Volcán Nevado del Ruiz. Antes del sobrevuelo encontraron barro donde se parte para la Y, lodo, un fuerte olor a azufre y empiezan a encontrar personas para rescatar.

Leopoldo y su amigo, el piloto Fernando Rivera comenzaron el sobrevuelo y esta conversación dentro de la pequeña avioneta lo resume todo:

- "Sabe qué Fernando, la mejor forma es que averiguen cuántos habitantes tenía Armero y de ahí, saquen las cuenta de que no hay ni siquiera un 2%, casi todos murieron".

- "Armero quedó arrasado casi en un 100%"

- "Quedó todo lodo, borró casas, borró todo"

- "Ni un 5% estará con vida, acabó con todo Armero".

Leopoldo no puede creer lo que está viendo. "Todo donde había sido Armero estaba totalmente despejado", dijo a Caracol Radio en entrevista. Pensó que no veía Armero por la neblina pero no, cuando empezaron la altura de fumigación (2 metros) empezaron a ver a la gente semienterrada pidiendo ayuda.

Ya estando entre 7 y 10 kilómetros había casas, carros, gente, animales y todo regado y no hubo manera de avisar.

En la Sierra había una pista que se llamaba la Carmelita. Ahí fue donde pudieron aterrizar y a dividir la dura tarea de dar aviso y de empezar a movilizar el rescate.

El piloto se fue a pie a comunicar la tragedia. Y a él, un amigo llamado 'El Chato' Ortiz y lo acompaña a dar la noticia a Palacio, pero nadie le creyó, incluso el Presidente Belisario Betancur. Él mismo le dijo 'No exagere Leopoldo y le colgó".

Del momento del sobrevuelo, 5:40 a.m. al momento del aviso a Presidencia, 6:40 a.m. Leopoldo luchó por hablar con Palacio e intentó comunicarse con medios de comunicación para dar esta triste noticia que terminó con la vida de 25.000 personas y borró a Armero del mapa.

Los medios tampoco le creyeron. Los periodistas Yamid Amat y Juan Gossaín fueron dos de los comunicadores que le dijeron a Leopoldo que no fuera tan irresponsable, que no jugara con esa información.

Todas las llamadas hechas por Leopoldo terminaban en lo mismo, incredulidad ante esta fuerte frase: ‘Armero es un mar de lodo’”.

Leopoldo no descansó. volvieron y construyeron tres helipuertos: uno sobre el hospital, otro sobre el mercadito y otro sobre el cementerio. Todo quedaba listo para cuando llegara la ayuda que tanto había pedido para empezar a rescatar a los sobrevivientes de la tragedia ocurrida tan solo una semana después de la Toma del Palacio en Bogotá y que se dio por una avalancha que descendió por el Río Lagunilla y que fue provocada por el deshielo del Volcán Arenas del Nevado del Ruiz.

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