En busca de tecnología: Así ha sido la visita de Marta Lucía Ramírez a Corea del Sur

La vicepresidente de Colombia, Marta Lucía Ramírez, detalló los contenidos de su visita a Corea del Sur, en la que ha confirmado el interés del Gobierno por la experiencia de la nación asiática en materia tecnológica de cara a potenciar un mayor crecimiento "económico, social y humano".

Durante la jornada de este lunes, Ramírez se reunió con varios representantes del Ejecutivo surcoreano, como el ministro de Finanzas, Hong Nam-ki.

En este encuentro, Ramírez subrayó el interés por aprender de la "experiencia coreana" en el marco de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), organismo en el que Colombia ingresará formalmente en el primer trimestre de 2020 y del que Corea del Sur se hizo miembro en 1996.

"Queremos concentrarnos en las áreas donde la OCDE puede ayudar más a Colombia. Y así como cuando Corea (del Sur) ingresó hace algo más de 20 años, queremos que nuestra economía pueda focalizarse más hacia el mercado internacional, en el desarrollo de una producción con más innovación, con más valor agregado", explicó Ramírez.

"Pero también estamos interesados en desarrollar mejores prácticas en materia de transparencia, de lucha contra la corrupción, como se hizo aquí", añadió durante una rueda de prensa ofrecida en la embajada colombiana en Seúl.

En la reunión con el primer ministro surcoreano, Lee Nak-yon (cuyo cargo equivale a una vicepresidencia), Ramírez quiso a su vez señalar las oportunidades de negocio para empresas surcoreanas en Colombia, especialmente las tecnológicas.

Asimismo, la vicepresidenta puso énfasis en el interés de su Gobierno por potenciar el crecimiento económico basado en la gran biodiversidad de Colombia, desde el desarrollo de biocombustibles a productos biofarmacéuticos o alimentos procesados.

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"Queremos que vuelva la democracia a Venezuela"

Ramírez aprovechó estos encuentros para destacar la creación de zonas económicas especiales cerca de la frontera con Venezuela en las que su Gobierno tendría interés en acoger empresas surcoreanas, con vistas a que participen además en la reconstrucción de las infraestructuras venezolanas si "retorna la democracia".

En ese sentido, la vicepresidenta quiso "reiterar la importancia de que haya mucha más presión de la comunidad internacional para que haya democracia en Venezuela y para que se acabe pronto la tragedia humanitaria", cuya carga está soportando crecientemente su país, que ya supera el millón y medio de venezolanos refugiados.

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