Carlos Galán dice no a la restricción de parrilleros: apuesta por tecnología para Bogotá

Ante la creciente preocupación por el aumento de los hurtos en Bogotá, el alcalde Carlos Fernando Galán ha decidido no implementar la restricción de parrilleros hombres en motocicletas como medida de seguridad. Según estudios previos, esta estrategia no ha sido eficaz en combatir la delincuencia.

De hecho, más del 99% de los motociclistas que transportan parrilleros no tienen ninguna relación con actividades delictivas, lo que evidencia que aplicar esta medida de manera generalizada afectaría injustamente a la mayoría de usuarios que cumplen la ley.

Por lo tanto, el enfoque de la administración se centra en el uso de tecnología avanzada para reforzar la seguridad en la capital. Actualmente, Bogotá cuenta con unas 5.800 cámaras de videovigilancia operativas, pero el plan es aumentar esta cifra a más de 18.000 dispositivos.

Con esto, se busca mejorar la capacidad de monitoreo en zonas críticas como Bosa, permitiendo identificar de manera más precisa a las bandas criminales que operan en la ciudad. Adicionalmente, esta estrategia permite una intervención más rápida y eficiente, mientras se respeta a los ciudadanos.

Es importante destacar que, aunque en el pasado la restricción de parrilleros hombres ha sido aplicada en ciudades como Medellín y durante la administración de Claudia López en Bogotá, sus resultados han sido objeto de debate.

Por un lado, algunos argumentan que disminuyen los hurtos y el sicariato; por otro, también generan problemas para quienes dependen de las motos para su movilidad. En este contexto, Carlos Galán ha reiterado que el uso de tecnología ofrece una solución más efectiva y menos invasiva.

Finalmente, el Galán reafirmó su compromiso con la seguridad de los bogotanos, asegurando que las estrategias deben estar basadas en evidencia y orientadas al bienestar colectivo.

Así, se busca garantizar un entorno más seguro sin recurrir a medidas restrictivas que puedan ser controversiales. Bogotá enfrenta retos significativos en materia de seguridad, pero la apuesta por la innovación de tecnología marca un cambio en la forma de abordar estos desafíos.