Katherine Miranda, Gustavo Petro y otros políticos se preguntan por recompensa por Otoniel

La supuesta entrega de alias Otoniel a la Fuerza Pública ha sido un tema candente que ha molestado a las autoridades colombianas, desde el presidente de la República hasta el ministro de la Defensa Nacional han manifestado que el hombre más buscado de Colombia fue atrapado en medio de un inmenso operativo, sin embargo, la posible entrega del jefe del clan del golfo levanta un manto de dudas.

Iván Duque se refirió a alias Otoniel con palabras gruesas, incluso indicó que era una ´sabandija´ y que lo que le esperaba era un calabozo en una cárcel de los Estados Unidos, pues las autoridades de este país lo solicitaron en extradición y el presidente de la República ha manifestado su afán porque esto se produzca rápido.

La prisa del presidente genera dudas en políticos como Gustavo Petro, quien pidió que Otoniel fuera incluido en la JEP y que desde allí dijera qué políticos han tenido que ver con él y quiénes han querido asesinar a la figura de la oposición política en el país.

Si la captura de Otoniel no fue cierta y este se entregó a la justicia, entonces surge la duda en los ciudadanos y en algunos políticos sobre qué pasó con el dinero de la recompensa supuestamente entregada.

“¡No es un tema menor! Si Otoniel se entregó, tal y como él lo afirma, dónde están los 3.000 millones de pesos que entregaron como recompensa? ¡Son nuestros impuestos! Aquí no se puede perder ni un peso!!!”, anotó Katherine Miranda, congresista, en su cuenta de twitter.

Gustavo Petro se sumó a las dudas y afirmó: “Si la versión de alias Otoniel es cierta, están refundidos 3.000 millones de pesos en recompensas”.

Otras figuras de opinión como Gilberto Tobón y Carlos Caicedo manifestaron que es grave que el Gobierno mienta, aunque no es raro que lo haga, pero preocupa que en un supuesto falso operativo se haya perdido la vida de un militar.

El Gobierno nacional insiste en que a Otoniel se le capturó y que él está mintiendo al afirmar que se entregó, pero a pesar de ello, un gran sector de la ciudadanía no está seguro de las palabras del mandatario, un hombre sin credibilidad y que ha pasado su administración con más pena que con gloria, además, y de acuerdo con varios sondeos, es el presidente con más baja popularidad en décadas.

La duda sigue latente, pero a Otoniel lo pretenden extraditar hacia los Estados Unidos de manera rápida.