El Krav Maga gana cada día más adeptos

Se trata de una técnica de defensa personal apta para todos los públicos

Actualización
El Krav Maga gana cada día más adeptos

Se trata de una técnica de defensa personal apta para todos los públicos

En los últimos años tal vez hayan empezado a oír hablar con insistencia del Krav Maga, incluso puede que conozcan gente que lo practica. Pero, ¿qué es el Krav Maga?

No es propiamente un deporte, ni un arte marcial; se trata de un sistema de defensa personal originario de Israel, y que fundó Imi Lichtenfeld durante los años 40 del pasado siglo. Imi comenzó a enseñar esta disciplina a los soldados de las Fuerzas de Defensa de Israel, pero tras su retirada del ejército siguió haciendo de instructor, esta vez para la población civil.

¿Y qué tiene de especial y lo hace tan popular? El Krav Maga, como hemos dicho, no es un deporte, ni tiene unas reglas determinadas; su objetivo es la autodefensa.

Todo vale para ello: los que lo practican aprenden a utilizar diversas partes del cuerpo como los codos, las rodillas o los puños, así como a dar patadas y emplear los pisotones, mordiscos o cabezazos. Todo ello para defenderse a uno mismo ante las situaciones más complicadas, como los robos, los ataques de varias personas, las amenazas con arma blanca, etc.

En el Krav Maga manda la efectividad y estar preparado para cualquier tipo de amenaza. Es por ello por lo que muchos cuerpos policiales (especialmente sus unidades de élite) han incorporado su entrenamiento para preparar a sus miembros; aunque también los profesionales de la seguridad, así como personas que puedan necesitarlo por su trabajo o sus circunstancias personales o laborales, reciben clases de esta disciplina en los últimos años.

Su práctica ha crecido en los últimos tiempos a nivel mundial, y Colombia no podía ser una excepción. El hecho de incorporar conocimientos que pueden salvarte la vida, combinados con ponerse en forma y conocer gente nueva, ha provocado un aumento en el número de personas que se apuntan a sus clases y también que cada vez haya más gimnasios que ofrecen cursos de Krav Maga para los ciudadanos.

No es nuevo que la población se decante por las artes marciales o  por los deportes de contacto. Disciplinas clásicas como el karate o el judo, entre otras, se han practicado desde hace mucho tiempo. Pero en los últimos años se han popularizado otras muchas y su crecimiento ha sido exponencial, como ocurre en el caso del jiu-jitsu. De hecho, Colombia se encuentra entre las primeras posiciones mundiales en su práctica.   

De entre las diversas causas que han hecho que estos deportes sean más accesibles al público destaca especialmente la gran expectación que ha causado el fenómeno de las MMA o Mixed Martial Arts; aquí cabe señalar a la UFC, que ha sabido, mediante convenios con televisiones y organizaciones de primer nivel, como Pokerstars o Reebok, promocionarse y conectar con el gran público. De hecho, existen eventos de MMA que se encuentran entre las retransmisiones más seguidas del mundo.

Pero como hemos dicho antes, el Krav Maga es diferente. No busca exhibirse en un combate ni ganar una medalla. Nunca tendrá representación en los Juegos Olímpicos. De hecho, se trata de una disciplina de la que, en el mejor de los casos, nunca tendremos que aplicar sus conocimientos en la vida real. Veremos su estilo en el cine, donde los protagonistas hacen gala de su entrenamiento para las escenas de lucha contra asesinos y otros delincuentes.

Pero aún sin ser protagonistas de películas, podemos obtener muchos aspectos positivos de su práctica. Lo que más refiere la gente que entrena a Krav Maga es que se siente más segura, que ha aprendido a no bloquearse ante situaciones de peligro.

El entrenamiento incluye cambios en la actitud, la posición corporal y la atención a lo que nos rodea, entre otros muchos aspectos. Se trabajan cuestiones como el hecho de pensar con las pulsaciones altas o moverse entre una aglomeración de gente.

En definitiva, el Krav Maga ya no es algo exclusivo de los profesionales de la seguridad: su enseñanza está al alcance de cualquier persona que quiera practicarlo y beneficiarse de las ventajas de su entrenamiento. Priorizando la efectividad, las situaciones reales y la actitud frente a las amenazas, se convierte en una herramienta que nos dotará de mayor autoconfianza y mejor forma física.