Carolina Cruz confesó la dura razón por la que empezó terapia psicológica
Carolina Cruz compartió el momento crucial donde la terapia fue su salvación.
Carolina Cruz compartió el momento crucial donde la terapia fue su salvación.
Carolina Cruz es una de las presentadoras más conocidas y queridas de la televisión Colombiana y ahora que su relación de casi 13 años con el actor Lincoln Palomeque llegó a su fin el año pasado a pesar de que de este amor nacieron Salvador y Matías la luz de los ojos de la ex pareja, ahora la también modelo ha estado en la lupa de varios seguidores tras la confirmación de su nueva relación.
La presentadora aparte de ser una de las más reconocidas por su trabajo en la televisión, ha sido muy amplia con sus seguidores en las redes sociales, por lo que por ese ámbito también ha logrado conseguir bastantes personas que la apoyan y que siguen cada paso de la también modelo, por lo que no fue la excepción la reciente revelación de la madre de Salvador y Matías para el medio AS Colombia.
De hecho, como muchos lo pensaban, la presentadora tuvo que hacer una gran preparación terapéutica para el momento en que decidió romper caminos con el padre de sus hijos, “Cuando ya eres mamá, ya todo cambia. Tenemos la responsabilidad de hacer las cosas bien para que los niños estén en un lugar sano, es un trabajo constante, no tenemos que vivir desde la rabia y desde el ego, trabajamos por la felicidad de nuestros gordos” destacó.
Y sin duda le ha funcionado, pues a pesar de estar separados ambos han sabido manejar las cosas de la mejor manera por el bienestar de sus dos pequeños, pues entendieron que su amor ya mutó y ahora es de respeto y admiración, su relación tenía que pasar para que sus hijos nacieran y al fin y al cabo ambos tuvieron grandes momentos juntos y seguirán compartiendo por el resto de sus vidas.
Ahora con la visualización que se le está dando a la salud mental, más y más figuras del entretenimiento han revelado que de las cosas que más les han ayudado ha sido la terapia, pues como dicen por ahí, “si la loca de la casa no está bien, nada lo está”.