Por: Juliana Hernández • Colombia.com

"Acá me da asco, miedo, todo; odio Colombia": Instagramer colombiana

Daniela Ardila fue motivo de indignación tras referirse con repudio a su país.

Un mal comentario que la puso en el ojo del huracán. Foto: Instagram @danielaardilam.
Un mal comentario que la puso en el ojo del huracán. Foto: Instagram @danielaardilam.

Daniela Ardila fue motivo de indignación tras referirse con repudio a su país.

Su nombre es Daniela Ardila, una mujer de 27 años que usa sus redes sociales para compartir diversidad de contenido, probablemente buscando darse a conocer en el mundo digital con el objetivo de ser lo que llaman hoy en día, 'influencer'. 

Finalmente alcanzó su objetivo al hacerse viral, pero para mal, esto después de que compartiera una serie de historias en su cuenta oficial de Instagram donde menciona lo mucho que odia Colombia y "el asco" que le genera tomar un bus en su país.

La joven estaba hablando de su intención por hacer una vida en otro lugar del mundo y de las actividades que estaría diespuesta a hacer en un principio para sostenerse a nivel financiero mientras logra obtener un trabajo estable.

"No sé, puedo trabajar de mesera mientras. A mí cero me da pena eso. Digamos que acá en Colombia un poquito, sí, gas, ¿pero en otro país? En otro país ni me va a dar pena coger busAcá me da ascomiedo. Todo. Ustedes saben que yo odio Colombia, pero bueno, soy de acá, me tocó aguantarme ser de acá y nada que hacer. Cada quien con sus gustos", dijo la joven.

Sus palabras le salieron caras, empezó a recibir críticas, cuestionamientos y hasta insultos en todas las redes sociales, tanto así que tuvo que publicar otros videos explicando qué era lo que realmente buscaba dar a entender.

En esas nuevas imágenes asegura que realmente se refería a las condiciones laborales en Colombia: "Es muy mal pago y nos explotan demasiado. Por eso me quiero ir", dijo, para luego referirse al tema del transporte público.

Respecto a los buses dijo que estaba hablando de la inseguridad a la que se exponen, especialemente las mujeres, cuando tienen que subirse a estos articulados: "¿a quién le gusta el bus? O sea, eso creo que no lo tengo que volver a explicar. El bus, además de ser físicamente feo, no hay seguridad. Yo no me siento bien en un bus [...] Entonces, es ese miedo y en otros países eso no me ha pasado", puntualizó.

Aclaró que la mayoría de personas que vio sus historias tergiversó el verdadero significado de su testimonio, cuando realmente son bastantes las personas que tienen su mismo pensamiento: "Estoy segura de que, como yo, hay muchos que piensan así. Estoy segura de que mis haters también piensan así"