La actriz de “El Joe”, Ana Lucía Silva, emigró y rehizo su vida conduciendo en Miami

La actriz Ana Lucía Silva dejó Colombia y hoy en EE. UU. conduce Uber para sostener a sus hijas y reconstruir su vida.
 

Por: Camila Hernandez • Colombia.com
De la actuación a conducir Uber en Estados Unidos. Foto: Instagram @yosoyanalusilva
De la actuación a conducir Uber en Estados Unidos. Foto: Instagram @yosoyanalusilva

La actriz Ana Lucía Silva dejó Colombia y hoy en EE. UU. conduce Uber para sostener a sus hijas y reconstruir su vida.
 

La vida de Ana Lucía Silva dio un giro que nadie veía venir. Tras ganar reconocimiento en producciones como El Joe, la leyenda y Allá te espero, su nombre empezó a aparecer cada vez menos en la pantalla. Tras un reality que no la dejó bien parada, la ausencia de nuevos proyectos la llevó a tomar una decisión difícil pero firme, dejar atrás su vida en Colombia y empezar de cero en Estados Unidos, esta vez junto a sus hijas.

Silva llevaba tiempo sintiendo que su carrera se había estancado y que la inestabilidad del medio la estaba alejando de lo que más le importaba, la seguridad y el bienestar de sus hijas. Así que por esto, quiso ''empezar de cero''.

De audiciones fallidas a noches manejando

Ya instalada en Estados Unidos, intentó recuperar su camino en la actuación. Hizo castings, tocó puertas en teatro y buscó espacios en el medio hispano, pero las oportunidades no aparecieron. Frente a la incertidumbre y con dos niñas que dependen de ella, decidió asumir un cambio radical, inscribirse como conductora en plataformas de transporte.

Ese trabajo, aunque lejos de las cámaras, le dio algo que ya no encontraba en su vida profesional en Colombia, tiempo y estabilidad. En las mañanas podía llevar a sus hijas al colegio, estar al tanto de su día y acompañarlas, y en las noches salía a manejar para garantizar el sustento del hogar.

El salto fue grande, de los sets y los reflectores a la rutina silenciosa de recorrer calles, pero encontró en ese ritmo un espacio para reorganizar su vida.

Maternidad, estabilidad y nuevos comienzos

En su relato, Silva es clara, ser madre pesa más que la idea de “ser famosa”. En Colombia, la inestabilidad laboral la obligaba a ausentarse, vivir con horarios impredecibles y depender de proyectos temporales. En cambio, en Estados Unidos, logró una estabilidad que le permitió volver a lo que es más importante para ella estar presente para sus hijas.

Aun así, Ana Lucía no ha apagado su faceta creativa. Mientras trabaja en la app de transporte, también empezó a explorar otros formatos. Uno de ellos, por ejemplo, es un pódcast que realiza junto a su hija mayor y que es un proyecto que no solo le permite mantenerse conectada con el medio, sino que también fortalece el lazo madre e hija.

Un giro de vida lejos del espectáculo

La experiencia de Ana Lucía Silva se aleja del mundo del entretenimiento. Su historia es de reinvención, decisiones difíciles y ajustes duros después de la fama. Pero también es un recordatorio de que, a veces, los caminos más valientes se construyen lejos de los reflectores. También expone las grietas del oficio en Colombia, donde la inestabilidad puede empujar incluso a quienes han brillado a buscar otro rumbo.

Hoy, sin cámaras ni flashes, Silva construye un nuevo capítulo. Su historia no está hecha de alfombras rojas, sino de resiliencia, elegir lo esencial, adaptarse y seguir adelante para darle a sus hijas y a sí misma, una vida más tranquila, mientras mantiene intacto el deseo de regresar algún día a la actuación en una película.