Atlético Nacional, como un tren, le pasó por encima al Deportivo Pereira

Atlético Nacional continúa demostrando su jerarquía en el fútbol colombiano y, pese a realizar varias modificaciones en su nómina tras la conquista de la Superliga, el conjunto 'Verdolaga' no tuvo mayores dificultades para imponerse en el Atanasio Girardot y sumar otros tres puntos que lo consolidan como firme candidato al título.

A pesar de las rotaciones implementadas por el técnico Javier Gandolfi, evocando la época dorada del club con Juan Carlos Osorio y sus rotaciones, el equipo paisa mostró orden y autoridad desde el inicio del partido. Deportivo Pereira intentó resistir, pero la presión ejercida por Nacional pronto inclinó la balanza a favor del local.

El primer golpe llegó al minuto 34, cuando Alfredo Morelos transformó un penal en gol, dándole la ventaja a Nacional y dejando en evidencia las dificultades defensivas del equipo dirigido por Luis Fernando Suárez.

Ya en la segunda mitad, Nacional no bajó la intensidad y continuó buscando ampliar la diferencia. Apenas transcurridos 11 minutos del complemento, Kevin Viveros sacó un potente remate con su pierna izquierda dentro del área, venciendo al Salvador Ichazo y dejando sin reacción a la zaga visitante.

El dominio de los locales fue total y, aunque Pereira intentó reaccionar, no encontró los caminos para descontar en el marcador. Con el partido prácticamente resuelto, Viveros volvió a aparecer en el minuto 82 para sellar su doblete y decretar la goleada con otra gran definición.

Con este resultado, el cuadro verdolaga sigue demostrando por qué es el equipo a vencer en Colombia. Campeón de la Liga en el segundo semestre de 2024, dueño de la Copa Colombia y reciente monarca de la Superliga, Nacional reafirma su favoritismo en la lucha por el título de la Liga BetPlay 2025-I.

Por otro lado, la situación de Deportivo Pereira es cada vez más preocupante. El equipo de Luis Fernando Suárez dejó una imagen discreta, sin respuestas futbolísticas ante un Nacional que dominó el juego de principio a fin. La presión sobre el estratega aumenta, y su continuidad podría verse comprometida si el rendimiento del equipo no mejora en las próximas fechas.