Medellín vs Santa Fe: Hugo Rodallega fue el héroe de la final de la Liga BetPlay

En un partido digno de una final, Independiente Santa Fe escribió este domingo una página dorada en su historia al conquistar su décima estrella en el fútbol colombiano, en el último partido de la Liga BetPlay 2025-I, la cual estuvo cargada de drama, garra y corazón.

En un Atanasio Girardot colmado, donde el favoritismo apuntaba hacia el local, el León rugió con más fuerza y remontó con autoridad un partido que parecía teñirse de rojo y azul. Con el 1-2 definitivo frente al Independiente Medellín, el cuadro cardenal se alzó como el nuevo campeón del fútbol colombiano.

La noche empezó con dominio alterno, pero pronto el Poderoso golpeó primero. Una jugada brillante de Francisco Chaverra, exjugador cardenal, terminó con un pase filtrado a Fydriszewski, quien no perdonó ante Aguerre y puso el 1-0 a los 18 minutos. Todo pintaba para fiesta local, especialmente por el ambiente y la inercia del DIM.

Sin embargo, Santa Fe no se amilanó y respondió con bravura, empujado por la calidad de Hugo Rodallega, quien tuvo un par de remates peligrosos que anunciaban la reacción bogotana. Y llegó el empate. En una acción que resume el espíritu luchador del León, un centro desde el costado encontró la cabeza de Harold Mosquera, quien se elevó por encima de su marca y conectó para vencer a Washington Aguerre. 

El 1-1 dejó mudo al estadio y volvió a encender la esperanza en los corazones cardenales. Medellín respondió de inmediato y exigió al máximo a Marmolejo con remates de Fydriszewski, pero el arquero argentino mantuvo el arco a salvo con seguridad.

En la segunda mitad, Santa Fe salió con el cuchillo entre los dientes. Rodallega avisó temprano con un contragolpe que exigió al rival, mientras el DIM buscaba desesperadamente la ventaja. El duelo se volvió de ida y vuelta, con el equipo local intentando por todos los medios romper la paridad. Pero la historia tenía guardado un momento inolvidable.

Corría el minuto 79 cuando Edwar López, recién ingresado, logró desequilibrar por la banda y envió un pase atrás que encontró a un Rodallega golpeado, pero no vencido. El delantero, con la determinación de un verdadero líder, remató de primera y firmó el 1-2 que silenció el Atanasio. Su celebración, entre lágrimas y dolor, fue el reflejo de lo que representa Santa Fe: lucha, resiliencia y alma.

Los últimos minutos fueron agónicos. Medellín se volcó con desesperación, tuvo en los pies del ‘Chino’ Sandoval la opción del empate, pero el tiempo no dio tregua. Cuando el árbitro decretó el final, el banquillo visitante estalló en júbilo. Santa Fe, contra todos los pronósticos, se proclamaba campeón en casa ajena, rompiendo una sequía que se extendía desde 2016 y alejando los fantasmas de sus tres finales perdidas recientes.