¿Por qué no come mi gato?: las razones más comunes de la falta de apetito en un felino
La falta de apetito en los gatos puede presentarse por circunstancias muy variadas, identifícalas para saber cómo tratarlas.
La falta de apetito en los gatos puede presentarse por circunstancias muy variadas, identifícalas para saber cómo tratarlas.
Los gatos son animales supremamente inteligentes. Cada cual tiene una personalidad única y especial, y aunque muchos dicen que son muy independientes y no les gusta la atención, la realidad es que requieren de múltiples cuidados al igual que otras mascotas domésticas.
Una de las mayores preocupaciones de los dueños de felinos es que sus amigos peludos dejen de comer de la nada, pues bien, si este temor se ha convertido en realidad, a continuación te compartimos algunas de las razones más comunes por las cuales los gatos pueden perder el apetito.
De acuerdo con especialistas del portal Experto Animal, “las causas que pueden llevar a este cambio en el comportamiento de nuestros felinos son diversas y encontramos desde motivos muy simples hasta complicaciones graves, que deben ser tratadas por un veterinario”, por esto, es esencial aprender a identificarlas.
1. Cambiaste su comida de forma repentina: los gatos, al ser animales carnívoros, suelen ser extremadamente exigentes con su alimentación y si sufren cambios abruptos es probable que rechacen la nueva comida. Recuerda que el cambio de una marca a otra debe ser progresivo para que su sistema digestivo y paladar puedan adaptarse con mayor facilidad.
2. La comida es de baja calidad: los gatos tienen requerimientos nutricionales especiales. Su dieta debe estar basada en su mayoría en carnes y otras proteínas. Algunas purinas económicas pueden no cumplir con la suficiente cantidad de proteína, por lo que pueden causar rechazo por parte del felino.
3. La comida está muy cerca del agua: la naturaleza salvaje de los gatos los hace tener un mayor instinto de supervivencia. Los gatos no domésticos deben buscar su comida y alimento en lugares distintos, por lo que no es muy recomendable dejar estos dos elementos juntos.
4. Tiene algún problema en sus dientes, encías o boca: si el gato sufre de gingivitis, periodontitis u otros problemas de salud bucal, es común observar como primer síntoma su falta de interés en consumir alimentos secos. Por otro lado, es probable que aún acepte alimentos húmedos o que no requieran masticación.
5. Tiene bolas de pelo atoradas en el estómago: los gatos son animales muy aseados y están constantemente acicalándose, lo que puede conducir a que se formen bolas de pelo en su tracto digestivo. Lo recomendable es peinarlos varias veces al día para evitar la acumulación excesiva de pelos y brindarles alimentos que contribuyan con la expulsión del pelo atorado.
6. Intoxicación: si tu gato ha comido algo que no le sentó bien y puede estarlo intoxicando es normal que no desee ingerir nuevos alimentos, en este caso, lo mejor es acudir al veterinario de inmediato.
7. Depresión, estrés o ansiedad: cuando los gatos no están bien anímicamente pueden presentar falta de apetito. Esta situación puede ser resuelta en casa con comidas muy olorosas y jugosas; sin embargo, si nada funciona es mejor acudir con un especialista.