Conoce la historia de Stuckie, el perro momificado dentro de un roble hueco

En 1980 un grupo de trabajadores de la compañía Georgia Kraft Corp, en Georgia, Estados Unidos, encontraron algo inusual mientras talaban árboles de roble castaña en el sur de la ciudad, como era costumbre, se trata de un perro momificado dentro de uno de los troncos huecos que, al parecer, ya llevaba más de 20 años en dicho estado.

Al ser conscientes de lo que habían hallado, los madereros decidieron donar el tronco al museo Southern Forest World Environmental Center, en el mismo estado, lugar donde hoy descansa y es el centro de atención de muchas personas que van hasta allí solo para ver tan extraña situación y su increíble historia.

Luego de que el cadáver del perro fuera analizado por un grupo de especialistas se llegó a la conclusión de que el can era un ayudante de casa en 1960, por lo que lo más probable es que haya quedado atrapado allí mientras perseguía alguna ardilla, entrando por las raíces y trepando hasta que su cuerpo le impidió volver.

Y es que, en los gestos de Stuckie, nombre que le fue puesto a este can mediante un concurso realizado por el museo en 2002, se puede observar la lucha por la que tuvo que pasar para intentar salir de dicho lugar y la angustia que atravesó al no poder hacerlo, pues su hocico quedó abierto y sus patas extendidas hacia arriba, como intentando apoyarse y subir para salvarse.

¿Por qué no se descompuso su cuerpo?

Uno de los cuestionamientos más grandes de muchas personas tiene que ver con la momificación del perro, considerando que tras haber pasado más de 60 años su cuerpo no debería estar en el perfecto estado en el que fue encontrado, pues no se descompuso a pesar del tiempo.

Expertos afirman que los robles contienen tanino, lo cual funciona como un desecante natural o momificador al absorber la humedad del entorno, lo que impidió la descomposición de la piel del animal, además también se debe a las condiciones secas del árbol hueco.

De hecho, es por esta misma razón que otros animales no pudieron detectar la presencia del can en dicho árbol, pues se encontraba en un nivel muy alto en el que el olor de la descomposición era casi imperceptible y circulaba fácilmente hacia arriba por el tronco por el “efecto chimenea”.

Cabe resaltar que en el lugar en el que Stuckie se encuentra exhibido también se brinda información sobre la industria del papel y de la madera, así como las especies de árboles presentes en Estados Unidos y las amenazas a las cuales se encuentran expuestos desde hace muchos años, en salas dedicadas exclusivamente a estos temas.