Empleado de Transmilenio adopta a tierno perrito abandonado en articulado: sus dueños no aparecieron

Un nuevo caso de abandono animal en el sistema de transporte masivo Transmilenio, en Bogotá, tuvo un final feliz, pues uno de los trabajadores decidió adoptar al canino que había sido encontrado deambulando solo en uno de los buses. 

El pasado 9 de julio, la empresa Transmilenio había reportado a través de redes sociales el hallazgo de un perrito de tamaño mediano color amarillo con blanco en la ruta C25. Según el sistema, el canino habría sido abandonado.

“Al Campín acaba de llegar este amiguito en el servicio C25, en un posible caso de abandono premeditado. Por favor, ayúdanos a difundir para intentar ubicar a su familia o envíanos un mensaje directo si quieres darle un mejor futuro y un hogar a este can”, escribió Transmilenio en la red social X.

La publicación se hizo con el objetivo de poder dar con el paradero de la familia del pequeño peludito, en caso de que se tratara de un extravío; sin embargo, sus dueños nunca aparecieron. El perrito se quedó aproximadamente cinco horas esperando a que alguien apareciera para hacerse cargo en el portal Suba. Al no encontrar ningún reporte, la empresa decidió dar al canino en adopción. 

Por fortuna, uno de los guardas de seguridad del Portal Suba decidió darle una segunda oportunidad y adoptarlo para llenarlo de amor y cuidados, así lo indicó el sistema de transporte a través de la misma plataforma.

“Tenemos bonitas noticias. El perrito que fue encontrado en Campín y que se quedó en portal Suba, fue adoptado el día de hoy por uno de nuestros colaboradores del equipo de vigilancia”, detalló la empresa en X. 

Este caso de abandono es solo uno de los tantos que se registran a diario en Bogotá y otras ciudades de Colombia. Según cifras oficiales, actualmente en el país hay 3 millones de perros y gatos en condición de calle. 

Cabe destacar que el abandono animal es un tipo de maltrato que es considerado delito en Colombia y puede ser sancionado con multas que van desde los cinco hasta los cincuenta salarios mínimos, si se encuentra culpable al dueño.