Powerslave, el mítico álbum de Iron Maiden cumple 36 años

Hoy hace 36 años, concretamente en la cálida Nassau en las Bahamas, una banda proveniente de la fría Londres llamada Iron Maiden, grababa un disco clave en la historia del Heavy Metal mundial, se trata de Powerslave, uno de los más exitosos Long Play de la historia de este género que puso sus primeros exponentes en el Reino Unido, un sonido que siempre escandalizó a la Reina, pero que a Nico Mc Brain, Steve Harris, Bruce Dickinson, Adrian Smith y Dave Murray, poco importó.

Hacía un año, 1983, que se había lanzado el álbum Piece of Mind, un trabajo que no solo popularizó a la banda, sino que le permitió hacer algo que décadas después se volvió común en todos los géneros musicales, el merchandising musical; Iron Maiden explotó la imagen de su “mascota” Eddie, una especie de alter ego que se repetía en camisetas y todo lo que le permitiera imprimirse.

Powerslave mostró una banda en pleno camino de consolidación musical y también le representó un prestigio mundial por su identidad gráfica, cada álbum de la banda era esperado con ansias para saber si la nueva portada de un disco superaba a la anterior, en dichas portadas siempre Eddie era el gran protagonista y para “Powerslave”, se le situó en un ambiente egipcio y lógicamente, de pirámides.

En Powerslave, la completa sincronización de la banda se pudo corroborar y el virtuosismo musical de cada uno de sus integrantes se hizo muy claro, Iron Maiden era un máquina poderosa y muy bien aceitada cuyos engranajes cazaban a la perfección, y de remate, la fantástica voz de Bruce Dickinson no tenía rival, tanto que las bandas de este género en Estados Unidos querían imitar el sonido pesado y la voz británica.

Las canciones que hicieron parte de este álbum tenían un significado y contenido muy especial, por ejemplo, “Aces High” representaba un homenaje a los pilotos de la Real Fuerza Aérea inglesa que enfrentaron a la poderosa aviación nazi de la Luftwaffe.

Como parte del trabajo promocional del álbum, Iron Maiden emprendió una de las giras más largas y exitosas de la historia, tardó poco más de un año y tuvo 187 conciertos, un número soñado por cualquier artista.

“The Rime of the ancient Mariner” es una canción inspirada por el poema de Samuel Taylor de 1798 que tenía el mismo nombre. 

“Two minutes to midnight”, una versión de la tensión mundial ante una guerra nuclear propia de la guerra fría, es la ambientación de cómo los poderosos tenían listo un botón para apretar y acabar con todo, ¿asunto del pasado?, quién sabe.

Powerslave es un álbum obligatorio para conocer y disfrutar de la historia del Heavy Metal y aquellos nostálgicos que conservan el disco original de acetato y vinilo entienden que son dueños de un tesoro.