La galaxia perdida sorprende a los astrónomos: Detalles revelados

La constelación de Coma Berenices es testigo de un fenómeno astronómico único y fascinante. A más de 900 millones de años luz de distancia, en un entorno hostil dentro de un cúmulo de galaxias, una galaxia perdida ha captado la atención de los expertos astrónomos. A pesar de su apariencia distorsionada, esta galaxia, conocida como JW39, ha revelado sorprendentes secretos sobre la formación estelar en condiciones extremas.

Las galaxias que residen en cúmulos enfrentan numerosos desafíos debido a la atracción gravitacional de sus vecinos más imponentes. Estas fuerzas pueden deformar y moldearlas, creando distorsiones impresionantes. Además, el espacio entre las galaxias en un cúmulo está lleno de un plasma incandescente conocido como medio intracúmulo. Este plasma, aunque ligero y delicado, ejerce una influencia significativa en las galaxias que lo atraviesan, despojándolas de su gas generador de estrellas.

Utilizando la Cámara de Campo Amplio 3 del legendario telescopio espacial Hubble, los científicos han logrado examinar en detalle los "tentáculos" arrastrados de JW39. Estos filamentos, son el resultado de un fenómeno conocido como desprendimiento de presión ram. A medida que JW39 atraviesa el cúmulo, la presión del medio intracúmulo le arrebata su gas y polvo, dando lugar a estas largas cintas de nacimiento estelar que se extienden desde su disco galáctico.

Lo que ha dejado perplejos a los investigadores es el descubrimiento de que la formación estelar en estos "apéndices" de la galaxia medusa no difiere significativamente del proceso que ocurre en el disco galáctico principal. A pesar de las condiciones extremas y la ausencia de gas, las estrellas continúan naciendo en estos tentáculos arrastrados.

"Es realmente sorprendente", comenta uno de los expertos astrónomos involucrados en el estudio. "Hemos descubierto que, incluso en un entorno tan inhóspito, la galaxia JW39 tiene la capacidad de generar nuevas estrellas. Este hallazgo desafía nuestras ideas preconcebidas sobre las condiciones necesarias para la formación estelar".

El telescopio Hubble, predecesor del nuevo y poderoso James Webb Space Telescope, ha sido fundamental en este descubrimiento. A lo largo de sus 33 años en el espacio, ha proporcionado a los científicos una visión invaluable del universo, revelando misterios cósmicos y ampliando nuestro conocimiento sobre el funcionamiento del cosmos.

El estudio de JW39 y sus tentáculos medusianos no solo proporciona una visión intrigante de la formación estelar en condiciones extremas, sino que también arroja luz sobre la evolución de las galaxias en entornos de cúmulos.