Felix Baumgartner superó la velocidad del sonido en su salto desde la estratósfera

El deportista de alto riesgo austríaco Felix Baumgartner se ha lanzó a una altura de 39.068 metros, para convertirse en el primer ser humano en romper la velocidad del sonido en caída libre.

Colombia.com

El deportista de alto riesgo austríaco Felix Baumgartner se ha lanzó a una altura de 39.068 metros, para convertirse en el primer ser humano en romper la velocidad del sonido en caída libre.

Después de una ascensión de dos horas y 35 minutos sobre Roswell (Estados Unidos), el globo que arrastró la nave alcanzó la altura idónea y Baumgartner se lanzó al vacío dentro de su traje presurizado idóneo para contrarrestar la baja presión y las bajas temperaturas.

Baumgartner rompió la barrera del sonido en los primeros 40 segundos de caída libre, cuando alcanzó la velocidad de 1.173 kilómetros por hora.

En condiciones normales, en la atmósfera terrestre la velocidad del sonido es de 1.234 kilómetros por hora, mientras que en la estratosfera se puede alcanzar con unos 1.110 kilómetros hora por la menor resistencia del aire, según la misión.

Baumgartner consiguió controlar el descenso y evitar caer en barrena, lo que le podría haber llevado a perder la consciencia o sufrir una hemorragia cerebral en casos de girar de forma descontrolada.

La caída libre de Baumgartner ha sido de 4 minutos y 20 segundos, mientras que en total requerió alrededor de unos 15 minutos en tocar suelo si se contabiliza su descenso en paracaídas.

El poseedor del récord del salto en paracaídas desde mayor altitud fue Joe Kittinger, de 84 años, que se arrojó en 1960 cuando era miembro de las Fuerzas Aéreas de Estados Unidos desde una altura de 31.333 metros.

La velocidad de caída de Baumgartner será recogida por el instrumental que lleva en su traje presurizado y expertos independientes ratificarán si ha superado la velocidad del sonido.

El salto coincide con el 65 aniversario de la gesta del estadounidense Chuck Yeager, el primer piloto que rompió la barrera del sonido a bordo de un caza X-15.

EFE