Política antitabaco de Uruguay mejoró salud de recién nacidos, según informe

La dura política antitabaco desarrollada por el Gobierno uruguayo desde 2007 permitió que un mayor número de mujeres dejaran de fumar durante el embarazo, lo que redundó en una mejora de la salud de los recién nacidos en el país, que nacieron con mayor peso, según un informe difundido hoy.

Foto: EFE
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La dura política antitabaco desarrollada por el Gobierno uruguayo desde 2007 permitió que un mayor número de mujeres dejaran de fumar durante el embarazo, lo que redundó en una mejora de la salud de los recién nacidos en el país, que nacieron con mayor peso, según un informe difundido hoy.

"Entre 2007 y 2012, la proporción de mujeres embarazadas que dejaron de fumar en el tercer trimestre creció de 15 % a 42 %, lo cual derivó en el aumento del peso del recién nacido en aproximadamente 163 gramos", dijo la ministra de Salud Pública, Susana Muñiz, en la presentación de la investigación "Campaña antitabaco en Uruguay: Impacto en la decisión de dejar de fumar durante el embarazo y en el peso al nacer".

Según relató la ministra, las medidas antitabaco desarrolladas por Uruguay en los últimos años permitieron ese aumento sustancial de la probabilidad de que las embarazadas dejen de fumar durante su embarazo, con sus consecuencias para la morbimortalidad infantil.

"La investigación muestra números muy importantes en la reducción en el consumo de tabaco y un aumento importante, de más de 35 %, en el peso del bebé al nacer. Los resultados son buenos porque lleva a una mejor calidad de vida", enfatizó Muñiz.

Con la asunción en 2005 de Tabaré Vázquez como presidente de Uruguay, oncólogo de profesión, el país comenzó una dura campaña contra el tabaco.

Primero pasó a estar prohibida su publicidad y su consumo en todo espacio cerrado público, como bares o restaurantes, y oficinas.

También se incrementaron los impuestos y se obligó a ocupar el 80 % de la superficie de las cajetillas con anuncios contra el consumo.

Además, se prohibió la venta de más de un producto de tabaco por marca, eliminando así la presencia de cajetillas denominadas "light" o bajas en nicotina.

Estas medidas llevaron a la multinacional Philip Morris, cuya facturación anual supera con creces el PIB uruguayo, a demandar al país ante un tribunal internacional por haber violado con sus medidas un tratado de protección de inversiones, proceso que se está llevando a cabo en París.

Muñiz explicó que fue una mezcla tanto de las políticas impositivas, como de las publicitarias y sanitarias "lo que posibilitó el descenso de mujeres embarazadas que consumían tabaco en la gestación".

EFE