La evolución de las VPN

Los servicios de las redes privadas virtuales (o VPN, como son más conocidas, por sus siglas en inglés), son relativamente nuevos.

La evolución de las VPN puede ser un poco compleja de explicar en términos técnicos. Foto: Shutterstock
La evolución de las VPN puede ser un poco compleja de explicar en términos técnicos. Foto: Shutterstock

Los servicios de las redes privadas virtuales (o VPN, como son más conocidas, por sus siglas en inglés), son relativamente nuevos.

Evidentemente, antes de la llegada de Internet no existían, su origen data de los años 90. Durante sus inicios la tecnología era de uso exclusivo y ahora se ha convertido en un servicio masivo que puede adquirir cualquier usuario desde la comodidad de su hogar.

En la actualidad contamos con una amplia gama de servicios de VPN: gratuitos, pagos, para burlar bloqueos por geolocalización, para privatizar datos, de empresas pequeñas, de compañías muy reconocidas, costosos, económicos, con características básicas de uso individual, con funciones complejas para múltiples usuarios, etc. El interés de un usuario común por una VPN puede partir desde querer hacer uso de Netflix hasta burlar la vigilancia masiva de gobiernos invasivos de la privacidad de la población.

La evolución de las VPN puede ser un poco compleja de explicar en términos técnicos, partiendo por su funcionamiento, pero aquí veremos cuáles han sido sus principales funciones, avances y qué podemos esperar de las nuevas tecnologías.

Historia de las VPN

Algunos expertos atribuyen la creación de las VPN al vicepresidente de Microsoft, Gurdeep Singh-Pall, quién desarrolló en 1996 los protocolos PPTP (protocolo de túnel punto a punto), los populares túneles con los que se suele describir cómo funciona una VPN. En aquel momento, Singh-Pall era ingeniero de software y logró conectar un computador a un servidor a través de una red virtual privada.

Este logro pasó un poco inadvertido en el momento —de hecho, en 2010, Microsoft fue a juicio contra VirnetX por patentar una tecnología similar— pero su evolución es lo que ha permitido que sea lo que conocemos hoy día. Durante sus inicios, las VPN eran empleadas solo por algunas empresas y gobiernos. Estas organizaciones necesitaban una red que les permitiera compartir de forma segura información privada entre empleados y oficinas.

Más adelante, el desarrollo de distintos tipos de VPN, de protocolos y mejores técnicas de cifrados fue lo que permitió la expansión y el crecimiento masivo.

Servicios modernos de VPN

En los últimos años hemos visto cada vez más servicios de VPN con múltiples funciones y adaptaciones para cubrir las necesidades de diferentes tipos de organizaciones y usuarios. De acuerdo al informe técnico disponible en el portal educativos de Microsoft, una VPN debe proporcionar estas soluciones básicas:

  • Verificación de usuario: ya que el servicio se debe prestar únicamente a los usuarios autorizados.
  • Administración de dirección: debe proveer una ubicación en la red para asegurar que la dirección privada del usuario se mantiene bajo resguardo.
  • Compatibilidad con varios protocolos: al menos con los comunes empleados en la red pública, como IP, Internetwork Packet Exchange (IPX) y otros.
  • Cifrado de datos: un sistema para asegurar que los datos en la red pública son inaccesibles para agentes externos.
  • Gestión de claves: debe generar y actualizar claves de cifrado para el cliente y el servidor.

Actualmente los servicios de VPN se esfuerzan por satisfacer una gran variedad de necesidades. Pueden burlar bloqueos por geolocalización, evitar la vigilancia de entes gubernamentales, permitir descargas de contenidos, mejorar la velocidad de navegación al burlar estrategias de throttling (cuando algunas compañías de servicios de internet disminuyen el ancho de banda para vender servicios más costosos) y más.

Algunos usuarios solo buscan proveedores que tengan sus servidores en locaciones remotas o en países específicos, mientras que a otros les preocupa la velocidad de navegación y buscan servicios que puedan cifrar sus datos sin hacer más lento su Internet. Al evaluar algunos proveedores modernos vemos que además existen tecnologías que han logrado satisfacer múltiples necesidades actuales de usuarios, juntarlas y simplificarlas en un mismo contrato de servicio.

El futuro de las VPN

Las VPN llegaron para quedarse y su adopción es muestra de ello. También los nuevos estilos de vida, el teletrabajo y la inmersión virtual de las nuevas generaciones nos demuestran que las VPN son necesarias y útiles.

Al pensar en el futuro de las VPN debemos considerar cuáles son los problemas actuales: filtraciones de datos, vigilancia masiva, ataques cibernéticos, fallas de seguridad. Al considerar estos inconvenientes podemos ver oportunidades en el desarrollo de las redes privadas virtuales.

Sin dudas, lo que más se está desarrollando en este nicho es la optimización de cifrado: los proveedores se están esforzando cada vez más por resguardar los datos y la información privada de sus clientes. Aquí también entran en conflicto las nuevas leyes de algunos gobiernos, pero solo el tiempo determinará si las estrategias de cifrado “irrompible” se continuarán desarrollando o no.

Además, otro tipo de proyectos —como softwares de libre acceso y mayor seguridad de inicio de sesión para los usuarios— son algunas de las nuevas propuestas. Sin embargo, los servicios de VPN aún trabajan en la optimización de su tecnología actual. Algunas presentan problemas por alto tráfico en los servidores, otras quieren mejorar su plataforma virtual. Lo que sí es seguro es que la divulgación y comprensión de sus servicios seguirá avanzando.

Conclusión

La VPN se crea como solución a un problema: enviar, de forma segura, información privada de la empresa entre empleados y oficinas. En la actualidad, sigue siendo la tecnología más valiosa para satisfacer esta necesidad y ahora provee más funciones, con mucho más alcance.

La gran variedad de servicios y las múltiples alternativas, han permitido que más usuarios se atrevan a probarlas y que su uso se normalice cada día más entre cibernautas. El crecimiento de las VPN va de la mano con la velocidad en la que apreciamos los avances tecnológicos. Están ahí para solventar bloqueos, mejorar la velocidad de internet, permitir el nuevo estilo de vida de millennials que trabajan a distancia y también para asegurar la información de empresas modernas que aprovechan internet para potenciar su alcance.

Mientras que el futuro de esta tecnología sigue dejando espacios para más desarrollo, entender su evolución nos demuestra su valor y necesidad tanto en la realidad actual como en próximos panoramas a mediano y largo plazo.