Cómo Colombia difiere de España en cuanto a digitalización y política

Las políticas y las start ups son fundamentales para garantizar que los beneficios potenciales de la transformación digital se compartan en toda la economía y la sociedad. Por ello, AWISEE es una agencia de marketing que colabora con trabajadores de muchas partes del mundo para ayudar a la digitalización.

Colombia: de camino hacia la transformación digital

Colombia ha estado creciendo rápidamente hacia niveles de vida más altos desde principios de la década de los 2000. Su crecimiento ha sido uno de los más fuertes de la región de América Latina y el Caribe. Y a pesar de sus tasas de pobreza y desempleo, Colombia se enfrenta a una serie de importantes retos, algunos derivados del entorno internacional y otros específicos de la economía nacional. 

El alto nivel de informalidad en el mercado laboral reduce los incentivos para innovar y la base fiscal para financiar las políticas públicas. La inclusión financiera sigue siendo baja, con consecuencias negativas para los individuos y las empresas.

Para hacer frente a estos problemas Colombia necesita adoptar una serie de medidas complementarias. Entre ellas, las políticas para potenciar la transformación digital, las cuales tienen un papel fundamental. 

La digitalización es un factor de innovación y productividad en las empresas. Hace posible que estas, incluidas las pequeñas, gestionen las actividades productivas en diferentes lugares. La digitalización puede ayudar a fomentar la inclusión financiera y a reducir la informalidad. También puede aumentar la eficiencia del sistema fiscal, proporcionando así más recursos para las políticas públicas del país. 

España: un país digitalmente desarrollado en Europa

En España se ha producido un notable avance, especialmente en los últimos tres años en el grado de digitalización de las empresas españolas, impulsado por el liderazgo de sus directivos en materia de transformación

Se han mostrado grandes progresos en los diferentes niveles de avance digital. También ha incrementado considerablemente el número de start ups, y al mismo tiempo el número de empresas más avanzadas. Debido a esto, ahora existe una clara orientación hacia el cliente como centro de la estrategia digital y como impulsor de las nuevas tecnologías del país.

Por otro lado, para las administraciones públicas, el Índice de Economía y Sociedad Digital (DESI), publicado por la Comisión Europea, es realmente una herramienta útil. Ya que sus resultados se basan en los cinco indicadores de rendimiento digital: conectividad, capital humano, uso de Internet, integración de la tecnología digital y servicios públicos digitales. 

Además, según su última edición publicada en 2020, España se posiciona en el undécimo lugar, con resultados destacados en servicios públicos digitales. Los datos abiertos y la conectividad, ocupan el segundo lugar. 

Sin embargo, en cuanto a capital humano, hay un margen de mejora, estando por debajo de la media europea, aunque mostrando un progreso con respecto a años anteriores. Además, España ocupa la decimotercera posición en integración de tecnologías digitales. 

Y en cuanto a las iniciativas gubernamentales de España, el DESI destaca las siguientes: 

• Una estrategia nacional de habilidades tecnológicas para que todos los ciudadanos del país alcancen unas competencias digitales mínimas.
• Una estrategia nacional de inteligencia artificial.
• El marco estratégico para la política de las PYME 2030.
• La Agenda para el Cambio: hacia una economía inclusiva y sostenible.
• Una estrategia de digitalización del sector agroalimentario y forestal y del medio rural.