Yoga aéreo y otras divertidas formas de ejercitarte

Has pensado en ello y tal vez hasta compraste una membresía al gimnasio como parte de tu resolución de Año Nuevo para empezar a moverte e incorporar el ejercicio a tu rutina diaria. Pero ahora, algunas semanas después, empiezas a aburrirte y a perder esa motivación.

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Bueno, no hay mejor momento que ahora para emocionarte de nuevo respecto a tu condición física. La actividad física regular es buena para la salud de todos, y las personas de todas las edades, sin importar el tipo de cuerpo que tengan, pueden estar físicamente activas. 

Prueba estas actividades inusuales que te recomienda una experta de Herbalife, para recargar tus rutinas de ejercicio y hacer que siempre quieras más. 

Nota: siempre es buena idea hablar primero con tu proveedor de atención médica para que te autorice a comenzar estas actividades.

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Hay varias razones por las cuales sentirse bien consigo mismo después de cualquier tipo de ejercicio: Puede ayudar a controlar el peso, reducir el riesgo de enfermedades cardíacas, controlar los niveles de azúcar en la sangre, cuidar de la salud mental y fortalecer los huesos y los músculos.

1. Trapecio: es posible que no puedas volar por los aires con la mayor facilidad, al menos no la primera vez, pero si a tu espíritu aventurero le atrae alcanzar nuevas alturas, súbete al trapecio.

No, no intentes esto en tu patio trasero, busca una escuela de trapecio establecida cerca de ti. Un entrenamiento en trapecio puede aumentar la fuerza de la parte superior del cuerpo y poner a prueba tu flexibilidad y coordinación.

Además, tu estado de ánimo y autoestima recibirán un buen impulso cuando conquistes ese “no puedo hacerlo” inicial y superes tus temores. 

2. Yoga aéreo: ya que estamos en las alturas, tenemos que mencionar este ejercicio, pues es muy diferente. Las hamacas de circo te halan hacia arriba y hacia los lados para que quedes colgando mientras trabajas en posiciones de yoga y en la alineación de tu cuerpo. Y no, no se empieza a tres metros de altura; tal vez a unos pocos centímetros. 

En 2016, el Consejo Estadounidense para el Ejercicio (ACE, por sus siglas en inglés) completó un pequeño estudio acerca del yoga aéreo que descubrió que ofrecía beneficios similares a los del ejercicio  aeróbico con intensidad baja o moderada. Después de un programa de seis semanas, los participantes experimentaron mejoras en el peso corporal, el porcentaje de grasa corporal y la presión arterial.

3. Trampolín: las instalaciones interiores para la práctica del trampolín son cada vez más numerosas, y algunos gimnasios, tanto tradicionales como pequeños, ofrecen clases pequeñas e individuales de trampolín para todas las edades. Estos ejercicios de bajo impacto fortalecen los glúteos, los tendones de la corva y los abdominales. Además, obtienes una fuerte dosis de entrenamiento de equilibrio con cada salto.

4. Baile: un estudio de 2016 en la publicación Journal of Sport and Health Science concluyó que una hora de baile cardio podría quemar como mínimo 400 calorías, ¡además de ser muy divertido! bailar también ayuda a la coordinación y es ideal para la tonificación general.

5. Ciclismo acuático: no hay estudios para ciclismo acuático en todas las ciudades, pero si estás visitando una ciudad importante como Los Ángeles o Nueva York – o si tienes tu propia piscina – considera la posibilidad de hacer ciclismo acuático o hidrospinning en una bicicleta especial.

Los aficionados se mueren por su increíble bajo impacto, ya que el cuerpo humano está compuesto de un 60 por ciento de agua, y tanto la parte inferior de tu cuerpo como tu tronco están “rodeados” de agua. 

Es un ejercicio para todo el cuerpo que te hace quemar calorías, hasta 800 por hora, mientras que el agua brinda soporte a las articulaciones. También usarás grupos musculares que tal vez no ejercites tanto en una clase regular de spinning.